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Obispos de Costa Rica: Orientaciones para la reconciliación y la unción

Con la finalidad de responder a la grave necesidad de impartir los sacramentos a los fieles, la Conferencia Episcopal de Costa Rica ha publicado una serie de orientaciones para la celebración del Sacramento de la Reconciliación y la Unción de los Enfermos.

Alina Tufani – Ciudad del Vaticano

Tras meses de confinamiento y la continuación del proceso de apertura gradual dentro de la crisis Covid-19, la Iglesia de Costa Rica anuncia las modalidades para confesarse y para la preparación al encuentro con Dios, ante la muerte. Con la finalidad de responder a la grave necesidad de impartir el sacramento de la Reconciliación a los fieles, que desde el mes de marzo 2020 no lo reciben en su modo ordinario, la Conferencia Episcopal de Costa Rica ha publicado una serie de orientaciones para la celebración del Sacramento de la Reconciliación y también para la Unción de los Enfermos.

Medidas de higiene y prevención para la Reconciliación

En un acto que implica una atención "persona a persona" como el Sacramento de la reconciliación, las medidas de higiene y prevención deben ser extremas, por lo que se pide que además del uso de la mascarilla, la distancia de seguridad y el uso de desinfectantes, las parroquias ofrezcan un horario específico y exclusivo para la atención de la confesión, de modo que los fieles puedan solicitar una cita individual previa para evitar aglomeraciones. La cita – sugiere el manual – debe tener un tiempo prudencial con un máximo de atención de unos 15 minutos para cada fiel.  También se aconseja que las confesiones se atiendan únicamente en las oficinas parroquiales u otro lugar suficientemente amplio y ventilado, pero no en los templos. Por último, se dispone que el sacramento se administre a través de una mampara o pantalla acrílica que brinde protección sanitaria, tanto al penitente como al sacerdote, mientras que la absolución sacramental se administrará sin contacto físico durante la imposición de manos.

Seguir el protocolo para el Sacramento de la Unción

En el caso del Sacramento de la Unción de los Enfermos, como establecido en el protocolo del pasado 27 de mayo, se podrá administrar cumpliendo todas las medidas de cuidado sanitario. Si se tratara de un fiel enfermo con Covid-19, se extremarán los cuidados para el ministro de conformidad con los protocolos que exijan las autoridades médicas y sanitarias. A esto se añade que sólo estarán presentes, al momento de la administración del sacramento, el sacerdote que lo celebra, quien lo recibe y, si fuera necesario, un familiar o cuidador del enfermo. Asimismo, la unción se administrará usando un algodón untado con el óleo de los enfermos y solo sobre la frente del enfermo. Dicho algodón se usará una única vez y deberá ser quemado una vez administrada la santa unción.

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22 agosto 2020, 13:54