Venezuela: Los migrantes no son enemigos ni bioterroristas
Alina Tufani – Vatican News
Los dos desafíos que tiene la Diócesis de San Cristóbal como “Iglesia en camino” son: defender la dignidad de los más vulnerables y la trasformación de la sociedad. Así lo planteó su Obispo, Monseñor Mario Moronta en la homilía de la celebración de Acción de Gracias por el 98° Aniversario de la creación de la diócesis, el 12 de octubre, en la Catedral de San Cristóbal.
Defensa de los más vulnerables
Al hablar de la defensa de los más vulnerables, el Prelado se refirió a los “caminantes”, los cientos de venezolanos que caminan hacia la frontera para llegar a Colombia huyendo de la crisis económica y humanitaria. El Obispo denunció que estos “caminantes” son víctimas de maltratos, robos y extorsión por parte de la Guardia Nacional, el Ejército y de la policía del país. Y sentenció:
Acogida, respeto y acompañamiento a los migrantes
En ese contexto, Monseñor Moronta recordó a los miembros de la Guardia Nacional, del Ejército y de la policía, que esos migrantes son “sus hermanos”, personas que huyen del país para buscar un mejor porvenir y que merecen respeto. Y dijo:
Respetar la dignidad del pobre y del que sufre
“Yo sé que se van a molestar – agregó el Prelado – pero quiero tocar el corazón de los militares y policías, que dejen en paz a los migrantes y persigan a los corruptos, pongan presos a los corruptos, pero respeten la dignidad del pobre y del que sufre”.
El Obispo de San Cristóbal – refiere una nota de prensa de la diócesis – también habló de las personas más vulnerables y más pobres que en estos momentos están sufriendo en medio de la indiferencia. A lo que afirmó:
Egoísmo, individualismo y corrupción
El segundo desafío, planteado por Monseñor Moronta es el de la transformación de la sociedad, “un desafío inmenso” que comienza con la renovación moral y la recuperación integral de la misión evangelizadora. “Esto nos lleva a crear las condiciones para contribuir seriamente en la captación, promoción, formación y envío de nuevos líderes, tanto sociales como políticos”, aseguró el Obispo. Y agregó que de este modo, se podrá “enfrentar al enemigo que se disfraza con el egoísmo, el individualismo y la corrupción” y dar una respuesta de cara al futuro, con valentía y fortaleza como sugiere el Papa Francisco en su carta encíclica “Fratelli tutti”.
Así lo expresó Monseñor Moronta al hablar de los 98 años de la Iglesia en San Cristóbal que “ha venido caminando en espíritu y verdad’. El Obispo reflexionó sobre el símbolo del “camino” en la historia de la salvación, y la aptitud peregrina de la Iglesia en la actualidad, guiada por Cristo resucitado. “Estamos ante un panorama que nos desafía y que requiere de una respuesta desde la conciencia de la misión evangelizadora que todos debemos desarrollar”, subrayó.
Sin presencia de fieles a causa de la pandemia de Covid-19, la Misa de Acción de Gracias fue concelebrada por el Obispo Auxiliar, Monseñor Juan Alberto Ayala, y algunos sacerdotes del presbiterio, todos manteniendo el distanciamiento físico, y respetando las demás normas de prevención ante la pandemia. Para los fieles la misa fue trasmitida por televisión, radio e internet.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí