Iglesia en Colombia socorre a los afectados por el huracán Iota

El Secretariado Nacional de Pastoral Social Cáritas Colombiana (SNPS) está activando mecanismos de ayuda a las comunidades afectadas por el huracán Iota que ha golpeado la costa Caribe colombiana, varios departamentos, y en particular San Andrés y la Isla de Providencia, en donde están funcionando los dos albergues construidos en el año 2005, tras el paso del Huracán Beta. Así lo ha anunciado su presidente, Monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, hablando con Vatican News.

“En el año 2005 construimos en Providencia dos albergues que aún están funcionando para personas afectadas por eventos naturales como estos terremotos. El uno está en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, en el sector de San Felipe. Ese se construyó después del paso del huracán Beta por la isla que dejó gran destrucción; y el otro construyó en esa misma época en el Refugio Centro Juvenil Padre Martín Taylor”.

Monseñor Henao informa que están en “permanente contacto con los aliados de ambas islas, con las pastorales sociales de la Diócesis de San Andrés, Providencia y Santa Catalina”, y que, “con la destrucción del hospital, el centro que se construyó en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen está en funcionamiento”. “Allí se encuentra una parte importante de los heridos, lo mismo que en el albergue del Centro Juvenil Martín Taylor”. “Estamos alertas – añade - para fortalecer esta obra que ya ha prestado un servicio a lo largo de tantos años y que hoy resulta ser de enorme utilidad”.

Las islas de San Andrés y de Providencia, junto con la de Santa Catalina, forman el único departamento insular del país, ubicado frente a las costas de Nicaragua, a más de 700 kilómetros de la Colombia continental. La Isla de Providencia, fue devastada casi en su totalidad por el poderoso huracán Iota, que destruyó sus infraestructuras y dejó al menos dos muertos y un desaparecido.

Tras visitar las islas de san Andrés y de Providencia, el presidente Duque aseguró que su Gobierno está movilizando todos los recursos humanos y técnicos para socorrer a los damnificados y comenzar la reconstrucción de las infraestructuras destruidas por el huracán.