Scholas: En medio de la pandemia un encuentro con la vida
Ciudad del Vaticano
El Papa Francisco recibió a los dos directores mundiales de Scholas, José María del Corral y Enrique Palmeyro. Durante la reunión, del Corral y Palmeyro compartieron con el Papa los resultados medidos por un comité científico interuniversitario en base a un estudio exploratorio descriptivo de tipo longitudinal sobre la valoración de los estados de ánimo de los propios estudiantes antes y después de cada clase virtual organizada por la Fundación.
Resultados del estudio
Según los resultados, la sensación de soledad de los jóvenes de más de quince países que participaron de las actividades virtuales de la Fundación disminuyó en un 44.60%, mientras que el nerviosismo o la intranquilidad en un 46.07% y la intensidad de la tristeza en un 69.09%.
Todas estas emociones negativas repercutían claramente sobre la salud de los jóvenes y sus entornos: parecían fuertes ante el COVID, pero se desconocía este otro aspecto fundamental, al punto que hubo estudiantes que confesaron haber querido quitarse la vida o vivir situaciones extremas, frente a lo que se dio intervención al equipo de profesionales y a los padres o tutores de estos.
Junto al Papa, del Corral y Palmeyro resaltaron cómo el incremento en la autopercepción de la intensidad de la esperanza llegó a un 43.04%, la actitud prosocial a un 53.35% y la alegría a un 68.46%. El informe fue compartido con el Dicasterio para el Desarrollo Humano y la Congregación para la Educación Católica.
Cómo empezó la iniciativa
Según compartieron los Directores de Scholas con el Papa Francisco, desde que empezó la pandemia, docentes de colegios italianos, afligidos por el estado anímico de sus alumnos y la falta de respuesta a las tareas escolares, se comunicaron con el equipo de Scholas y juntos comenzaron las intervenciones virtuales que lograron un efecto sorprendente en la salud emocional de los jóvenes. Así fue que se sumaron luego estudiantes de España, Portugal, Francia, Rumania y Emiratos Árabes. También de Polonia, Rusia, Moldavia, Argentina, Paraguay, Chile, Colombia, Panamá, Japón, entre otros.
Todas las semanas era la cita, las clases empezaban muy temprano para los estudiantes de Los Ángeles en Estados Unidos y muy tarde para los de Japón. Participaban gratuitamente más de 2.000 estudiantes en una misma aula sin paredes durante todos estos meses.
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