Lo que hace Francisco es todo lo contrario de la indiferencia, mirar a la cara

La cultura de la indiferencia; el egoísta y narcisista, son el corazón de las causas de la pobreza y de la guerra que sufre el mundo. En estos encuentros que el Papa realiza en sus peregrinaciones y viajes apostólicos, se trata de todo lo contrario. Dijo ya en el mensaje anterior a su visita: "Deseo encontrarme con ustedes, mirarlos a los ojos, ver sus rostros y poder entre todos experimentar la cercanía de Dios, su ternura y misericordia que nos abraza y consuela".

"Conozco la historia de sus países…” dice en el video. Ese conocer es también lo contrario de la indiferencia. Por eso puede afirmar: "Deseo, con ustedes, dar gracias a Dios por la fe y el amor a Dios y a los hermanos más necesitados, especialmente por el amor que ustedes tienen hacia aquellos que están descartados de la sociedad. La cultura del descarte cada vez nos ha invadido más. Quiero hacerme partícipe de las alegrías de ustedes, las tristezas, de sus dificultades y esperanzas, y decirles que no están solos, que el Papa está con ustedes, que la Iglesia entera los recibe, que la Iglesia los mira”.

Que el coraje apostólico de Papa Francisco nos ayude a vencer la indiferencia y a comprometernos con la cultura del encuentro.