Imagen de archivo Imagen de archivo 

Iglesia en Guatemala: No ser indiferentes a otras pandemias

Erradicar las “pandemias” de la violencia, la impunidad y la pobreza es el llamado de Monseñor Víctor Hugo Palma Paul, Obispo de Escuintla, en su mensaje para la Cuaresma, una ocasión para “recobrar la salud integral” de la persona humana, la física y la espiritual

Alina Tufani – Vatican News

Mientras la preocupación del mundo se centra en el logro de la curación del Covid-19 y la prevención e inmunización de la población, para Monseñor Víctor Hugo Palma Paul, Obispo de Escuintla, es necesario “recobrar la salud integral” de la persona humana, es decir esa “salud integral también en lo espiritual” de la que todos están necesitados. En su mensaje  para la Cuaresma 2021 el prelado escribe:

“Como en el caso de las enfermedades físicas, deseando la salud, tratamos de seguir las indicaciones médicas ¡no descuidemos el camino espiritual para llegar a la vida nueva y abundante en la Pascua de Resurrección, meta de toda Cuaresma cristiana!”

Otras “pandemias conocidas” graves y dolorosas

Monseñor Palma Paul pone de relieve que nuevamente el tiempo de Cuaresma se vivirá en medio de la pandemia mundial de Covid-19, una situación que “condiciona la existencia de todos en el dolor, la angustia, la duda”, pero que también es una invitación a la reflexión y al compromiso sobre otras “pandemias conocidas” que son igualmente graves y dolorosas y “ante las cuales somos insensibles”.

Un panorama que se agrava con la impunidad

Para el Obispo de Escuintla estas otras “pandemias” son la “violencia delincuencial”, que sigue “arrebatando vidas” en su jurisdicción, como los asesinatos horrendos de niñas en Tiquisate, las numerosas víctimas de sicariato, la propiciación de la mala vida y el vicio, del narcotráfico o de los atentados diarios en asaltos. Un panorama que se agrava con “la impunidad y corrupción de los jueces, capaces de cualquier atropello”. Y advierte:

“Ninguno puede eximirse de la responsabilidad, directa o indirectamente – por la indiferencia – de estas ‘pandemias’”

E invita a recobrar la “salud integral mediante la fe, la esperanza y la caridad”. En particular, el Obispo de Escuintla comparte el llamado del Papa Francisco en su mensaje para esta Cuaresma de vivir profundamente el ayuno, la limosna y la oración. El ayuno como “experiencia de pobreza aceptada”, es decir, compartir el pan con los hermanos golpeados por la pandemia y la pobreza. La limosna como camino de caridad que “limpia los pecados” sabiendo que la pandemia ha privado a muchos del pan de cada día y la oración, como momento de “apertura /encuentro con Dios” teniendo el valor de “alejarnos no sólo de informaciones falsas pero llamativas, sino de la distracción de la vida que tanto promueven los medios comunicación, incluso en este tiempo de solidaridad y reflexión”.

Seguir las celebraciones litúrgicas a través de los medios

 

Por último, monseñor Palma ante una Cuaresma que nuevamente  será vivida con las necesarias limitaciones en las actividades de litúrgicas y parroquiales y la prespecialidad de los fieles en algunas iglesias, invita a seguir las celebraciones litúrgicas y de piedad a través de los medios de comunicación y las redes sociales. Y concluye:

“¡Vivamos esta Cuaresma, de duras condiciones físicas y ambientales, como oportunidad de seguir los caminos del cuidado espiritual que redundará en beneficio de toda la persona!”

Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí

20 febrero 2021, 10:36