El Consejo Pastoral Pescadores de Brasil denuncia conflictos medioambientales

Ciudad del Vaticano

El informe sobre los conflictos socioambientales y las violaciones de los derechos humanos en las comunidades pesqueras tradicionales de Brasil fue presentado el martes 29 de junio, en la solemnidad de los Santos Pedro y Pablo, el primero de los cuales es el patrón de los pescadores. La Conferencia Episcopal Brasileña lo ha publicado en su página web.

Según el documento, la llegada de proyectos de gran envergadura a las zonas de pesca artesanal provoca violaciones de derechos y otros impactos negativos en las comunidades desde el punto de vista socioambiental y socioeconómico. En el Estado de Pará, por ejemplo, el avance de la industria minera y la construcción de puertos afectan a las comunidades por agua y tierra, como compartió la pescadora Josana Pinto da Costa: "Los grandes proyectos han traído muerte y destrucción a nuestro pueblo, atacan nuestros territorios, atacan nuestra cultura, atacan nuestra identidad, y nos han quitado el sueño, han provocado muchas enfermedades", afirmó.

El informe denuncia las violaciones sistemáticas

El acceso limitado a los territorios, la deforestación, la especulación inmobiliaria, los negocios turísticos, los latifundios y las granjas son los principales factores identificados en la investigación del Consejo Pastoral de Pescadores como causas de los conflictos en las zonas de las comunidades de pescadores tradicionales en 14 estados brasileños. "La investigación denuncia las violaciones sistemáticas a las que se han enfrentado las comunidades pesqueras durante estos 520 años de colonización y explotación y cómo en este último periodo estos conflictos se acentúan, agravando la situación", explicó, por su parte, la secretaria ejecutiva del Consejo, Ormezita Barbosa.

Conflictos e infracciones

La encuesta patrocinada por el informe se basó en los formularios rellenados por los grupos locales del Consejo y las entidades asociadas. Los conflictos, según la encuesta, afectaron a más de 49 mil hogares, con 40.237 mujeres y 17.906 niños y adolescentes. Son 434 informes de conflictos e infracciones que componen el escrito final que estará disponible la próxima semana.

Según el Consejo, las consecuencias socioambientales incluyen también la disminución de la cantidad y variedad de peces, la destrucción del hábitat y la sedimentación. En el ámbito socioeconómico, los pescadores experimentan un acceso limitado a la tierra, una reducción de los ingresos familiares, la pérdida de rasgos tradicionales, conflictos internos y la ruptura de los lazos comunitarios. En la lucha por sus territorios, por ejemplo, los pescadores sufren amenazas de muerte y racismo en diversas formas, además de otras violaciones a las que se ven sometidos, como delitos sexuales, asesinatos, investigaciones policiales, lesiones corporales, demandas judiciales, racismo religioso, intentos de asesinato y violencia de género.

Datos sobre la pandemia

El informe también ofrece datos sobre la pandemia: sólo el 39% de las comunidades declararon casos de Covid-19, pero las repercusiones socioeconómicas del empeoramiento de la situación que ya experimentaban los pescadores se dejaron sentir con fuerza durante este período. La reducción de los ingresos fue la más evidente.

Asimismo, el Obispo de Brejo y responsable de la Pastoral de los Pescadores, Monseñor José Valdeci Santos Mendes, intervino durante la presentación del documento. Como San Pedro, liberado de las cadenas de Herodes por el ángel enviado por Dios, el prelado señaló como mensajeros de Dios a los hombres y mujeres "que están comprometidos con la vida, que están comprometidos con la lucha, que están comprometidos con un mundo más justo y fraterno". El obispo motivó, por tanto, a los agentes a continuar la lucha contra los Herodes del mundo actual, "que matan, niegan los derechos, niegan la vida, masacran a los pobres, a las comunidades tradicionales".