Patriarcado de Jerusalén condena ataque a escuela católica en Gaza
Lisa Zengarini - Vatican News
El Patriarcado Latino de Jerusalén ha condenado enérgicamente la redada lanzada por las fuerzas israelíes contra su Escuela de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza el domingo 7 de julio por la mañana, en la que al parecer murieron al menos cuatro personas.
Cuatro víctimas
El ataque aéreo tuvo como objetivo dos aulas de la planta baja de la escuela que acoge a un gran número de familias palestinas desplazadas. Entre los muertos se encontraba un alto cargo de la administración de Hamás, Ihab al-Ghusain, viceministro de Trabajo del grupo.
El ejército israelí afirma que el complejo se utilizaba como escondite de militantes y albergaba "una instalación de fabricación de armas de Hamás". Tsahal declaró que había tomado medidas para minimizar el riesgo de daños a civiles.
Asalto a una escuela gestionada por la ONU el 7 de julio
El asalto a la escuela católica se produjo sólo unas horas después de que las fuerzas israelíes atacaran el sábado una escuela gestionada por la ONU, matando al menos a 16 personas e hiriendo a 75 que se encontraban allí refugiadas, según las autoridades de Gaza, entre ellas dos trabajadores de la UNRWA. El incidente provocó la indignación de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos ante los repetidos ataques contra sus instalaciones.
Desde el comienzo de la guerra en la Franja de Gaza tras el asalto de Hamás del 7 de octubre, miles de palestinos del enclave han buscado refugio en hospitales, escuelas y otras infraestructuras civiles. Sin embargo, Israel acusa a Hamás y a otros militantes de esconderse en estos lugares.
Los civiles deben permanecer fuera de la escena de combate
En su declaración, el Patriarcado Latino de Jerusalén también condenó "en los términos más enérgicos" los ataques contra no combatientes, "o cualquier acción beligerante que no garantice que los civiles permanezcan fuera de la escena de combate".
Afirmó que sigue rezando y esperando "que las Partes lleguen a un acuerdo que ponga fin inmediatamente al horrible baño de sangre y a la catástrofe humanitaria en la región".
Incidentes anteriores
El recinto de la parroquia católica de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza, que alberga a unos 600 cristianos desplazados, no es nuevo en los ataques de las fuerzas israelíes en su lucha contra Hamás. En diciembre del año pasado, un francotirador israelí mató a dos mujeres cristianas, una madre y su hija, en el interior del recinto.
El incidente se produjo casi dos meses después de un ataque aéreo contra un edificio adyacente a la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio en el que perdieron la vida varias personas allí refugiadas.
El Papa Francisco y la Santa Sede, junto con las Naciones Unidas, han instado en repetidas ocasiones a la protección efectiva de los civiles en el conflicto.
En un debate abierto del Consejo de Seguridad en Nueva York en mayo, la Misión Permanente de la Santa Sede lamentó que las infraestructuras civiles, como escuelas, hospitales y lugares de culto, se hayan convertido en "objetivos devastadores, afectando desproporcionadamente a la vida de los inocentes e indefensos".
Víctimas y rehenes israelíes y número de muertos palestinos
Más recientemente, la Comisión Justicia y Paz de Tierra Santa rechazó el argumento de la "guerra justa" que legitima la devastación y la matanza de civiles en respuesta a los ataques de Hamás del 7 de octubre.
En aquella incursión sin precedentes, los terroristas palestinos mataron a unas 1.200 personas y tomaron 251 rehenes, 116 de los cuales permanecen en Gaza, 42 de los cuales se cree que han muerto. La guerra de represalias de Israel ha matado hasta ahora al menos a 38.000 personas en Gaza, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Sanidad de la zona, dirigido por Hamás.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí