Papa Francisco: es bello estar aquí con ustedes
Manuel Cubías – Ciudad del Vaticano
La belleza del encuentro
“Es bello estar aquí con ustedes”. Esta es la primera frase del discurso del Papa Francisco en la favela de Varginha, Manginhos. “Habría querido llamar a cada puerta, decir “buenos días, pedir un vaso de agua fresca, tomar un “cafezinho”, hablar como amigo de casa…”
El Papa resume bellamente el primer elemento de la solidaridad: descubrir al otro como persona, con dignidad, con valores, con algo que puedes darle y que ella te puede compartir.
La solidaridad de los olvidados es incómoda
Un segundo elemento es que en el encuentro solidario, todos crecemos. El tema del poder, de los poderosos que dan lo que les sobra no puede ser considerado solidaridad. Por eso el Papa Francisco añade:
“Y el pueblo brasileño, especialmente las personas más sencillas, pueden dar al mundo una valiosa lección de solidaridad, una palabra a menudo olvidada u omitida, porque es incómoda”.
Compartir lo que tenemos
La incomodidad surge de la obligación de compartir la riqueza. No se trata de filantropía. Se trata de dar lo que tengo al que no tiene: “Que cada uno, según sus posibilidades y responsabilidades, ofrezca su contribución para poner fin a tantas injusticias sociales”, afirma el Papa.
Estamos frente al tercer elemento: la acción. Cada uno desde nuestras posibilidades y responsabilidades debemos actuar. La actuación comienza respetando y defendiendo la vida propia y la de los demás. Buscar el verdadero desarrollo del ser humano, que lleva a defender la familia, la convivencia, a promocionar la educación integral de niños y jóvenes; a no olvidarnos de los adultos mayores.
Celebrar la alegría
La solidaridad produce una alegría compartida, celebrada. Pero esto no es puntual, por eso el Papa nos recuerda en el Angelus del 29 de julio de este año, que “El anuncio de Cristo, pan de vida eterna, exige un compromiso generoso de solidaridad en favor de los pobres, los débiles, los últimos y los indefensos”.
La solidaridad es compartir recursos y que lo que producimos sirva para el desarrollo de todos los seres humanos, para su realización y no para su destrucción.
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