Refugiados sudaneses en Chad Refugiados sudaneses en Chad 

ACNUR: 80 millones de dólares para los refugiados sudaneses en Chad

Desde el comienzo del conflicto en Sudán, Yamena ha acogido a 600.000 nuevos refugiados sudaneses, otros 400.000 se encuentran en el país africano desde 2003. Estas cifras atestiguan la gran afluencia de refugiados en la historia del país durante las dos últimas décadas. Magatte Guisse: Acción urgente para atajar esta crisis humanitaria

Augustine Asta - Ciudad del Vaticano

"Hoy estamos registrando una media de 600 refugiados al día y esto sólo en el punto de entrada de la ciudad de Adré, lo que es un indicador de la inseguridad y la incertidumbre en Sudán". La nueva representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Chad, Magatte Guisse, describe la "catástrofe humanitaria" en el este de Chad, donde afluyen las personas que huyen de Sudán.

"La situación sigue siendo alarmante", afirma Guisse, "y esto ha ejercido presión sobre los recursos de Chad, especialmente en las zonas de acogida, donde la población local se enfrenta a los mismos retos que los refugiados". Casi 600.000 personas han huido de Sudán para escapar de una guerra devastadora que comenzó en abril de 2023. Desde los primeros días de 2024, "casi 130.000 personas han cruzado la frontera con Chad en busca de refugio, y los observadores", añade Guisse, "estiman que esta cifra podría ascender a 250.000 en los próximos meses".

El reto humanitario

La situación es, pues, extremadamente preocupante y Adré tiene dificultades para acoger al creciente número de refugiados sudaneses que viven en condiciones difíciles. "Actualmente - prosigue el representante del ACNUR - hay 200.000 refugiados en el punto de entrada de la ciudad, de los cuales el 90% son mujeres y niños. Es desgarrador ver cómo estas personas duermen en refugios improvisados, pequeños y ancianos en el suelo, muchos de ellos sin colchones. Esta población se encuentra en la más absoluta indigencia. Hay incluso casos de desnutrición".

El impacto psicológico de la guerra

El conflicto en Sudán ha tenido un impacto psicológico devastador en los refugiados. Muchos de ellos han sido testigos o víctimas de una violencia y unas pérdidas inimaginables. "El trauma del desplazamiento, como en muchas crisis de refugiados, la separación de los seres queridos y la incertidumbre sobre el futuro han tenido un impacto en su salud mental - certifica Guisse - es difícil escuchar historias de violencia. Algunas personas nos dicen a veces que si participaran en actividades les ayudaría a desviar la atención de las atrocidades que han sufrido".

Para ayudar a estos refugiados a hacer frente al impacto emocional del conflicto, ACNUR y sus socios ofrecen servicios de apoyo psicológico. Magatte Guisse subraya que "cualquier ayuda, cualquier apoyo, les ayudaría a hacer frente al trauma que están experimentando". Algunos refugiados informan de que sus actividades económicas han cesado y que la inseguridad no les permite dedicarse a actividades para cubrir sus necesidades. Esta situación les obliga a buscar seguridad alimentaria en Chad, mientras que otros huyen de la guerra".

Por el momento, el escenario más pesimista en caso de que continúe el conflicto en Sudán es el de una mayor escalada de violencia, desplazamientos y sufrimiento. "La crisis humanitaria  -revela Guisse - podría empeorar, con más personas necesitadas de ayuda y recursos limitados para satisfacer sus necesidades. Por desgracia, el conflicto en curso también podría desestabilizar la región. Este es otro aspecto a tener en cuenta".

Llamamiento a la movilización

Para el representante del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados en Chad, es imperativo que la comunidad internacional actúe de inmediato para abordar las causas del conflicto y apoyar a los ya afectados. Desde el comienzo de la crisis, la agencia ha creado diez ampliaciones y seis nuevos emplazamientos, el más reciente de los cuales sólo puede acoger a 50.000 personas. Los otros cinco están completos.

Es esencial disponer de recursos adicionales para abrir nuevos emplazamientos con todas las instalaciones necesarias. El problema, desgraciadamente, es que, continúa Guisee, "el llamamiento de 2024 para la respuesta humanitaria en el este de Chad está infradotado, con sólo el 11% de los casi 215 millones de dólares solicitados hasta ahora, y el tiempo se acaba para cubrir las necesidades inmediatas". "Es urgente - concluye - que se proporcionen unos 80 millones de dólares para construir tres emplazamientos con servicios e infraestructuras esenciales y para reubicar al gran número de personas que siguen llegando a la frontera, lejos de las condiciones de hacinamiento e insalubridad, y proporcionarles asistencia vital, como refugio, alimentos, agua potable y acceso a la sanidad y la educación".

 

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08 agosto 2024, 14:54