Visita del Papa al Santuario del Pesebre en Greccio
Al final de la audiencia general del último miércoles de noviembre, Francisco anunció su visita del domingo 1 de diciembre al Santuario franciscano del Pesebre en Greccio:
Para saber cómo será acogido el Papa Francisco y con qué espíritu se conoció la noticia de su visita a Greccio, entrevistamos al padre Luciano De Giusti, vicario del Santuario franciscano del Pesebre, quien comenzó diciéndonos que los miembros de esta fraternidad conocieron la noticia “con gran sorpresa” y, obviamente, “con gran alegría”. “Realmente – dijo – no nos lo esperábamos. Para nosotros es verdaderamente una gran alegría, un gran honor recibir al Papa aquí en el Santuario, aunque ya haya venido el 4 de enero de 2016 de visita privada. Vino con el obispo de Rieti, Monseñor Pompili”.
Ante la pregunta de cómo será recibido y si habrá muchos laicos que quieran conocer al Santo Padre el vicario del Santuario explicó que están organizando todo junto con el obispo. Y afirmó que ciertamente habrá laicos que estarán en la iglesia del Santuario, al igual que sacerdotes en la parte superior de la iglesia. Luego, en la pequeña plaza del Santuario, habrá otros fieles y otros a lo largo de la calle. También nos dijo que darán la bienvenida al Papa en la Gruta del Pesebre donde en el lejano año 1223 San Francisco celebró la Navidad precisamente aquí, en Greccio.
Recordamos, precisamente, que Greccio es el lugar donde San Francisco de Asís preparó el primer Pesebre, y que todo este valle sagrado de Rieti es un lugar de espiritualidad franciscana. De ahí la pregunta al padre Luciano De Giusti si se vive aún este espíritu de San Francisco:
“Sí, se vive y se respira aún el mensaje de Francisco de Asís. Aquí en Greccio – nos dice – en este período de Navidad, acogemos a muchos peregrinos. Aquí verdaderamente está este mensaje de un Dios que se hace pequeño, que desciende y que quiere ser acogido en nuestra vida. Por lo tanto aún es un mensaje para cada uno de nosotros del humilde Dios que se hace niño y que realmente no causa miedo a nadie”.
El mensaje de Dios niño inherente al Pesebre está vivo en la tradición de las casas y de todas las iglesias en Italia y en el mundo. Sin embargo, hay realidades que quisieran que esta tradición fuera arrinconada o relegada a un asunto privado. Mientras, en cambio, el Pesebre habla a todo el mundo...
Ante esta reflexión el vicario del Santuario nos dijo que, en su opinión, se trata también del signo de nuestra fe, de nuestra cultura occidental, de la fe en el Señor que se hace carne. Aunque a veces se lo desperdicia mucho en la esfera pública, si bien piensa que pueda “ser un signo para dar a conocer incluso a los que no comparten la fe cristiana, dónde está el corazón del misterio de nuestra salvación para nosotros los cristianos”. Y añade que cree “que a veces algunas batallas son más ideológicas que cualquier otra cosa”.
Al recordar que a lo largo de los siglos el Pesebre se ha convertido también en arte, en belleza y de participación de una comunidad, le hemos preguntado al padre Luciano De Giusti si la fe, para ser alimentada, también necesita de los símbolos, estos símbolos vivos. Y su respuesta fe:
“Sí, ésta es verdaderamente la belleza. El arte es algo que enfatiza nuestra fe. La fe es también belleza, es también cultura. De modo que todo lo que encontramos en nuestro patrimonio cultural nace de nuestra fe, del Dios que se hace carne y, por lo tanto, cada uno interpreta este acontecimiento a lo largo de los siglos, pero también hoy”.
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