El Papa: el pesebre es una imagen artesanal de paz
María Cecilia Mutual - Ciudad del Vaticano
El pesebre es un Evangelio vivo en los lugares en donde se vive: en las casas, en las escuelas, en los lugares de trabajo y de encuentro, en los hospitales, en las cárceles y en las plazas. Lo recordó el Papa Francisco esta mañana en el curso de la audiencia general de este tercer miércoles del tiempo de Adviento, explicando qué significa el pesebre en el tiempo de Navidad y evidenciando su sentido profundo para la familia.
Tras recordar que dentro de una semana es Navidad, el Papa propone a los fieles presentes en el Aula Pablo VI que se pregunten cómo se están preparando “para la fiesta del Festejado” y explica un “modo simple pero eficaz” para hacerlo: “hacer el pesebre”. Francisco afirma que él también este año “ha seguido este camino”, visitando la ciudad de Greccio en donde San Francisco realizó el primer belén y que también, en esa ocasión escribió una carta para recordar el significado de esta tradición. Hacer el pesebre, precisa a continuación el Obispo de Roma, “es celebrar la cercanía de Dios”, que se hizo hombre, “un niño”, que “siempre ha estado cerca de su pueblo”:
Jesús, alimento para nuestra existencia
A continuación Francisco describe el Belén, en donde vemos junto a Jesús, a María y José: “podemos imaginar los pensamientos y los sentimientos que tenían mientras el Niño nacía en la pobreza: alegría y consternación” – precisa. Y exhorta a invitar a la Sagrada Familia “a nuestra casa”:
El pesebre invita a la contemplación
Con una mirada hacia la vida actual marcada por ritmos frenéticos, el Papa asegura que el pesebre ofrece otra enseñanza de vida, una “invitación a la contemplación”, nos recuerda "la importancia de detenernos":
El pesebre, ternura de la familia
Ayer, recuerda el Santo Padre, me regalaron una estatuilla de un pesebre especial, pequeñito, que se llamaba: “Dejen descansar a mamá”. Estaba la Virgen adormecida y José con el Niño allí, que lo hacía dormir. Cuántos de ustedes deben dividir la noche entre marido y mujer por el niño o la niña que llora, llora, llora. “Dejen descansar a mamá”: es la ternura de una familia, de un matrimonio”.
El pesebre, evangelio vivo
“El pesebre es más que nunca actual – añade el Papa – mientras cada día se fabrican armas y tantas imágenes violentas, que entran en los ojos y en el corazón”. “Es un Evangelio vivo”. Y en español, dice:
Con Jesús ya nos estamos solos
Finalmente, del pesebre podemos recibir una “enseñanza sobre el sentido de la vida”. En el pesebre - agrega Francisco – se ven escenas cotidianas: los pastores con las ovejas, herreros que trabajan el hierro, molineros, que indican que Dios viene "a nuestra vida concreta". Por eso es importante “hacer un pequeño belén en casa, siempre, porque es el recuerdo de que Dios vino a estar entre nosotros, nació de nosotros, nos acompaña en la vida, es hombre como nosotros, se hizo hombre como nosotros” y por tanto "en la vida cotidiana, ya no estamos solos".
El saludo a los peregrinos
En el curso de la audiencia, el Papa saludó en diversos idiomas a los fieles presentes en el Aula Nervi procedentes de varios países. A los peregrinos de lengua española, reiteró su invitación:
Los invito a preparar el belén en sus hogares y a detenerse para contemplarlo, para que el nacimiento de Jesús los llene de alegría y les conceda la paz. Les deseo a todos Feliz Navidad.
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