Francisco desea a los fieles ucranianos que la Navidad traiga la paz

Francesca Sabatinelli, Ciudad del Vaticano

Que pasos concretos conduzcan a la paz en Ucrania. Este es el llamamiento y el deseo que el Papa dirigió, en sus saludos tras el Ángelus, a los católicos y ortodoxos que mañana celebran la Navidad:

Desde esta mañana el alto el fuego unilateral

Treinta y seis horas de alto el fuego unilateral. Moscú la adoptó desde las 12.00 hora local del 6 de enero hasta la medianoche del sábado 7 de enero, día de la Navidad ortodoxa. Se trata de la primera gran tregua desde el comienzo de la guerra, el 24 de febrero. Hasta ahora se habían alcanzado acuerdos, pero sólo a nivel local, como la evacuación de civiles de la fábrica Azovstal de Mariúpol. Sin embargo, la propuesta del Kremlin fue rechazada de plano por Ucrania, para la que Moscú sólo quiere ganar tiempo, lectura que también hizo el presidente estadounidense Biden.

La propuesta de Erdogan y Kirill

La propuesta de tregua fue planteada primero por el presidente turco Erdogan, que sigue proponiendo a Ankara como mediadora en el conflicto, y recogida después en un llamamiento del patriarca ortodoxo ruso Kirill. El Presidente Putin ordenó entonces a su ejército que silenciara sus armas para permitir a los fieles cristianos ortodoxos, mayoritarios tanto en Rusia como en Ucrania, asistir a los oficios de Nochebuena y Navidad. El presidente ucraniano Zelensky, para quien la tregua no es más que "una excusa para detener el avance de las tropas ucranianas en el Donbás" y poder "acercar equipos, municiones y hombres" a las posiciones ucranianas, la ha rechazado claramente. Si ha de haber una tregua, es la advertencia de Zelensky, sólo tendrá lugar cuando los rusos se retiren, mientras que un "diálogo serio", anuncia Putin en el otro bando, sólo podrá tener lugar si Kiev "cumple las exigencias conocidas y tiene en cuenta las nuevas realidades territoriales".

Tanques estadounidenses y alemanes en Kiev

En el mismo tono que Zelensky, varias cancillerías internacionales, desde Washington a Londres, pasando por Berlín, han expresado que la elección de Putin no traerá "ni libertad ni seguridad" a Ucrania, y "no hará avanzar las perspectivas de paz". Por ello, el presidente ruso ha polemizado con los países occidentales que, de seguir armando a Kiev, adoptarían una actitud destructiva en Ucrania. Acaba de anunciarse la decisión de Estados Unidos y Alemania, acogida con satisfacción por Zelensky, de entregar tanques de infantería a Kiev, después de que Francia hubiera anunciado el envío de tanques ligeros. En el país, los bombardeos continuaron a lo largo del jueves, una pareja y su hijo de 12 años murieron en la región de Jersón, mientras que dos personas murieron y otras tres resultaron heridas en un ataque contra un pueblo de la región de Zaporiyia.