Caso Orlandi: archivado el procedimiento de los huesos del Cementerio Teutónico
Vatican News
“El procedimiento relativo a la presunta sepultura en el Vaticano, en el Cementerio Teutónico, de los restos de Emanuela Orlandi, ha sido archivado por el Juez Único del Estado de la Ciudad del Vaticano, que ha aceptado plenamente la petición de la Oficina del Promotor de Justicia”. Es lo que se lee en un comunicado de la magistratura difundida por la Oficina de Prensa de la Santa Sede, de la que se desprende que los restos humanos encontrados en los osarios adyacentes a las dos tumbas abiertas son todos colocados en una época muy anterior a la de la desaparición de la joven.
Como se recuerda, el expediente había sido abierto el verano pasado, tras la denuncia de los familiares de la joven, hija de un empleado de la Santa Sede que residía con la familia dentro del Estado, desaparecida el 22 de junio de 1983 en el centro de Roma. A raíz de esa denuncia, que indicaba una tumba en el Cementerio Teutónico como posible lugar de la sepultura de Emanuela, el Promotor de Justicia Gian Piero Milano y su adjunto Alessandro Diddi habían autorizado el acceso a la sepultura y la apertura no de una sino de dos tumbas cercanas situadas en el interior del Cementerio Teutónico. Ambas tumbas resultaron estar vacías.
Las investigaciones habían demostrado que entre los años 60 y 70 del siglo pasado se habían realizado trabajos para ampliar el Colegio Teutónico: las sepulturas de las princesas Sophie von Hohenlohe y Charlotte Federica de Mecklemburgo, ambas muertas en el siglo XIX, habían quedado vacíos. Otras comprobaciones realizadas ese mismo día habían permitido identificar dos osarios colocados bajo el pavimento de una zona dentro del Pontificio Colegio Teutónico, cerrados por una trampilla.
La decisión del Promotor de Justicia fue sellar inmediatamente los dos osarios y preparar nuevas verificaciones. "Las pruebas efectuadas sobre estos hallazgos – se lee en el comunicado de prensa hodierno – llevadas a cabo por el Prof. Giovanni Arcudi, Perito de Oficio, en presencia de los asesores de la familia Orlandi, llegaron a la conclusión de que los fragmentos encontrados se remontan a una época anterior a la desaparición de la pobre Emanuela: los más recientes datan de hace al menos cien años. De ahí la solicitud de archivo, que cierra uno de los capítulos de la triste historia, en la que las Autoridades Vaticanas han ofrecido, desde el principio, la más amplia colaboración”.
Precisamente con este espíritu de colaboración y atención a las peticiones de la familia de la joven desaparecida, “el procedimiento de archivo deja a la familia Orlandi la posibilidad de proceder, en privado, a cualquier otra investigación sobre algunos fragmentos ya encontrados y conservados, en contenedores sellados, en la Gendarmería”.
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