Beatificación Adele de Batz: continuo camino ascendiente hacia la santidad

Ciudad del Vaticano

Adele de Batz de Trenquelléon nació el 10 de junio de 1789, un mes y cuatro días antes del asalto de la Bastilla. Debido a la revolución, la familia tuvo que exiliarse tanto en España como en Portugal. Una de las paradas fue San Sebastián, cerca de la frontera entre Francia y España, donde Adele hizo su primera comunión. Sus deseos de consagración religiosa, orientados hacia el Carmelo, fueron mejor delineados por el Sr. Ducorneau, preceptor de su hermano Charles, quien compiló para ella una regla de vida. Más tarde, junto con su amiga Jeanne Diché, dio vida a la "Pequeña Sociedad" que tenía como objetivo la recristianización del campo; solo tenía quince años y medio.

Después de descubrir que la Pequeña Sociedad era muy similar a la Congregación Mariana iniciada por el Padre Guillaume-Joseph Chaminade en Burdeos, se puso en contacto con él. Gradualmente, bajo la guía de Chaminade, su ardor apostólico encontró una salida en la fundación de la primera comunidad religiosa femenina a la que Adele dio a luz, en 1816, a Agen. Así nacieron las Hijas de María, a quienes luego se agregó el título de Inmaculada, conocidas hoy como Hermanas Marianistas. Madre María de la Concepción, como Adele se llamó después de su profesión religiosa, murió el 10 de enero de 1828 en Agen, Francia, cuando tenía 38 años. Su proceso diocesano se abrió en 1965 en Agen y fue declarada Venerable el 5 de junio de 1986. Su beatificación ha sido programada para el 10 de junio de 2018, en el Parque de Exposiciones de Agen. Su memoria litúrgica, sin embargo, se estableció el 10 de enero, el día exacto de su nacimiento en el Cielo. Sus restos mortales descansan en el coro de la capilla del Instituto Sainte-Foy en Agen.