Obispo de Nicaragua: Dios se da a los hombres de buena voluntad

Manuel Cubías – Ciudad del Vaticano

En medio de una de las peores crisis político-sociales, con centenares de muertos y de encarcelados por protestar contra las medidas gubernamentales, el obispo de Matagalpa se suma a los llamados a la reconciliación y a la paz para construir una nación que respete la vida y los derechos de las personas.

Ha nacido el anunciado por los profetas

Mons. Álvarez expuso que en el nacimiento de Jesús se cumple la promesa  anunciada por los profetas y que a los “hombres que habitaban tierra de sombras” se les “ha dado una gran luz”. Explicó que “en la oscuridad de la noche, la luz se haca palabra y esperanza… Y el resultado es sentirnos abrazados por el tierno amor de Dios y nos compromete a amar a Dios y a los hermanos”.

La Palabra hecha Carne

El obispo de Matagalpa  nos dice que Navidad es tiempo en el que “se afianza nuestra fe en el poder redentor de la Palabra hecha carne que derrota el mal y nos libera de la esclavitud de la muerte.

Vivir la solidaridad

El obispo hizo un llamado a “hacernos partícipes activos de la solidaridad y la construcción de  la paz. Él nos libera de las tinieblas del mal y nos pide que ofrezcamos nuestra contribución concreta para que se realice su designio de Paz.

Además, citando a San Juan Pablo II, monseñor Álvarez clamó para que “cesen tantas formas de creciente violencia, causa de indecibles sufrimientos, que se apaguen tantos focos de tensión, que se consolide la voluntad de buscar soluciones pacíficas, respetuosas de las legítimas aspiraciones de los hombres y de los pueblos”.