REPAM: Llamamiento a la defensa de territorios y pueblos originarios
Ciudad del Vaticano
“Instamos a los Estados, responsables de garantizar los derechos, a proteger la vida y salvaguardar a las personas, y a que cumplan su obligación de dar seguridad y garantías a los y las líderes: es la exhortación de la Red Eclesial Panamazónica –REPAM–este 21 de enero, como consecuencia de la situación de amenaza que viven al menos 7 líderes indígenas del departamento del Putumayo, en Colombia. El comunicado afirma también con fuerza que “la defensa de la vida y del territorio no puede ser apagada a vista y paciencia de quienes deben garantizar los derechos, más aún cuando su vida ha sido públicamente amenazada”.
"Según la comunicación enviada por los propios líderes y su organización de base OPIAC a la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica – COICA, - explica el texto de la REPAM - ha circulado un panfleto que comunica a los líderes que se les da un plazo para abandonar el territorio y resguardar a sus familias".
Violación de derechos culturales
El departamento de Putumayo ha sido escenario de una serie de protestas de parte de ciudadanos y comunidades campesinas e indígenas, reivindicando el derecho al territorio, saqueado por el progreso de la exploración y de la explotación del petróleo y de otros recursos naturales, con la consiguiente violación de sus derechos culturales: autonomía, autodeterminación, vida y sobrevivencia como pueblos. Se trata de la explotación de alrededor 25.000 hectáreas de bosques tropicales donde viven campesinos y comunidades indígenas donde se custodian más de 1.000 especies de fauna y 384 de flora que estarían corriendo riesgo.
9 países amenazados
"La situación en los 9 países de la cuenca amazónica, frente a estas amenazas es de profunda preocupación”, expresa también el texto de la Red Eclesial Panamazónica, “donde muchos de los y las líderes sociales, indígenas y campesinos, están siendo asesinados y perseguidos”, registrando, el año pasado en Colombia, “un índice alarmante de asesinatos, llegando a casi 500 de personas vinculadas a procesos sociales y organizativos”.
El alarmante panorama se extiende también a Brasil donde – indica la REPAM – “la situación no mejora” y desde donde “cada día se tienen noticias sobre actos de violencia, muertes y agresiones permanentes a los pueblos indígenas”, con “signos alarmantes de creciente vulneración de derechos para los defensores y defensoras de la Amazonía”, también en el resto de los países de la cuenca.
Llamamiento a las organizaciones internacionales
En medio de situaciones de “extrema violencia” donde “la Hermana Madre Tierra” y los pueblos originarios y campesinos se encuentran en riesgo, la REPAM hace también un “llamado a las organizaciones internacionales como la ONU y la CIDH para acompañar los procesos de protección y defensa, movilizando a los estados a ejercer su responsabilidad”.
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