Mensaje obispos al pueblo de Brasil: queremos sociedad democrática

Ciudad del Vaticano

En el documento, los obispos advierten que la opción por un liberalismo exacerbado y perverso que deshidrata al Estado casi hasta eliminarlo, ignorando las políticas sociales de vital importancia para la mayoría de la población, favorece el aumento de las desigualdades y la concentración del ingreso en niveles intolerables, haciendo a los ricos más ricos a expensas de los más pobres y más pobres.

Desempleo un problema nacional

El documento llama la atención sobre los graves problemas experimentados por los brasileños, como el creciente desempleo, "otra herida social, al superar el umbral de los 13 millones de brasileños, sumada a los 28 millones de subutilizados, según datos del IBGE, muestra que las medidas tomadas para combatirlo, hasta ahora, han sido ineficaces". Además, es necesario preservar los derechos de los trabajadores".

La violencia deshumaniza

La violencia, como señala el mensaje, alcanza niveles insoportables. "En nuestros oídos de los pastores viene el grito de las madres que entierran a sus hijos pequeños asesinados, de las familias que pierden a sus seres queridos y de todas las víctimas de un sistema que instrumentaliza y deshumaniza a las personas, dominado por la indiferencia. El feminicidio, el submundo de las cárceles y la criminalización de quienes defienden los derechos humanos exigen acciones enérgicas a favor de la vida y la dignidad humana", dice el texto.

Según el documento, "el verdadero discípulo de Jesús tendrá siempre en el amor, el diálogo y la reconciliación la manera eficaz de responder a la violencia y a la inseguridad, inspirado en el mandamiento "No matarás" y no en proyectos que flexibilicen la posesión y la posesión de armas".

Reforma fiscal y bien común

En cuanto a las necesarias reformas políticas, fiscales y de seguridad social, los obispos afirman en su mensaje que sólo pueden ser legitimadas si se hacen con vistas al bien común y con la participación popular para atender, en primer lugar, a los pobres. "El Brasil que queremos surgirá del compromiso de todos los brasileños con los valores que tienen el Evangelio como fuente de vida, justicia y amor", dice el texto.

¿Cuál es el modelo de sociedad que deseamos?

El mensaje expresa cuál es la sociedad que anhela la Iglesia: “Queremos una sociedad cuyo desarrollo promueva la democracia, valore conjuntamente la libertad y la igualdad, respete las diferencias, fomente la participación de los jóvenes, valore a los ancianos, ame y sirva a los pobres y excluidos, acoja a los migrantes, promueva y defienda la vida en todas sus formas y expresiones, incluido el respeto a la naturaleza, en la perspectiva de una ecología humana e integral”.

Participación de los cristianos

Los Obispos recuerdan que “El camino es largo y exigente, pero no olvidemos que "Dios nos da la fuerza para luchar y sufrir por el bien común, porque Él es nuestro Todo, nuestra mayor esperanza" (Benedicto XVI, Caritas in veritate, 78).

Que la Virgen María, madre del Resucitado, nos obtenga la perseverancia en la senda del amor, la justicia y la paz.