Miranda: México necesita recobrar sus valores y construir la paz

Patricia Ynestroza-Ciudad del Vaticano

En México, son años, que es víctima de varias masacres, debido entre otras cosas, a la guerra entre cárteles de la droga. De entre todos los escenarios, sobresalen las matanzas perpetradas en Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y más recientemente en Veracruz. Entrevista a secretario de la Conferencia Episcopal Mexicana, Mons. Alfonso Miranda.

Personas inocentes han muerto en los ataques liderados principalmente por miembros del crimen organizado, quienes utilizan desde gasolina, bombas molotov, hasta granadas o ráfagas de metralleta.

Tanta violencia en México

El secretario de la Conferencia Episcopal de México, y obispo auxiliar de Monterrey, habla sobre la terrible violencia que azota al país, debido a las luchas entre carteles de la droga, entre otros.

Según el prelado, esta violencia, obedece a el problema de los migrantes, de la trata de personas, el tráfico de armas y el de drogas.

El obispo lamenta la gran descomposición social que tiene que ver con la desintegración familiar, la pérdida de valores en las familias y en la sociedad.  ¿La Iglesia mexicana qué hace para contrarrestar esa violencia? Mons. Miranda recuerda que es necesario, imperativo construir la paz, perdonar…

Los estados donde se vive más fuertemente la violencia son Guerrero, Michoacán, Tamaulipas, Estado de México, entre otros.  El Obispo dijo que en México se ha perdido el valor de la vida de cualquier persona y se la arrebatan al mejor postor, y por mínimos precios.

La violencia en el país ha dejado en luto a muchas familias. Aún se siente el dolor del asesinato del estudiante seminarista de la Universidad Intercontinental, Hugo Leonardo Avendaño Chávez, se ha acusado al sacerdote Francisco Javier Bautista, como presunto asesino, por ahora está en prisión preventiva en espera de una resolución. En México, actualmente la ley lleva a prisión preventiva, por estar indiciado, mientras se realizan investigaciones, y se dilucidan responsabilidades. El episcopado expresó en un comunicado su dolor por este hecho

Actos de violencia contra asistentes a Misa en diócesis de Córdoba

En mayo, dos jóvenes fueron asesinados en el estacionamiento de una iglesia cuando estaba a punto de comenzar una Misa de una quinceañera. El Obispo de Córdoba en el estado mexicano de Veracruz, Mons. Eduardo Patiño Leal, lamentó el hecho, expresando en un comunicado que “la violencia no tiene límites, ni horas ni lugares, ni respeto alguno por lo sagrado”. La Conferencia Episcopal mexicana, hizo referencia también a este doloroso hecho.

“Con profundo dolor, manifestamos nuestra tristeza y consternación, ante los hechos de violencia ocurridos afuera de la rectoría de Nuestra Señora de Guadalupe, en Fortín de las Flores en Córdoba, Veracruz”.

Paz, igualdad, fraternidad y colaboración

También se ha hablado de la cantidad de migrantes que en s u travesía desde Centro América, pasando por México para llegar hasta los EEUU, han sido asesinados muchos de ellos.

Los obispos de México “manifestamos el gran dolor que sentimos por los actos de violencia acontecidos en los últimos días contra personas inocentes, tanto en nuestro país como en los Estados Unidos, provocados por la intolerancia, la xenofobia y la discriminación”, se lee en el comunicado firmado por el presidente de la CEM, Mons. Rogelio Cabrera.

La violencia que sacude al país, fue uno de los temas de los Obispos cuando llevaron a cabo la pasada Asamblea Plenaria: “Hacemos nuestras las angustias del país, que sigue sufriendo violencia, inseguridad, pobreza, inequidad, incertidumbre política, deterioro ambiental y desigualdad social. Al mismo tiempo, nos alienta la esperanza de un cambio integral a partir de nuestra fe, de la familia y de una educación con valores humanos y cristianos”.

Con Decisión Construyamos la Paz. Basta de Falsas Seguridades

Un documento del episcopado de hace dos años, y sin embargo tan actual. Entones se hacía referencia a la escalada de la violencia, que ha ido en franco ascenso, “aún y cuando las cifras oficiales no reflejan totalmente la situación, es notorio el espectro de muerte y otras violencias no denunciadas que se ciernen sobre nuestra nación, así como el duelo prolongado que se vive en nuestras familias ante las desapariciones, tanto denunciadas como no denunciadas, se lee en el texto.

“Los factores que contribuyen a la violencia y a la inseguridad, siguen vigentes y, aún más, se han endurecido, entre ellos la corrupción, la desigualdad, el desempleo, la impunidad, la ineficaz procuración de justicia, el abandono al campo, entre otros. Por otra parte, la violencia y la inseguridad ya se han extendido a casi toda la geografía nacional y algunas de nuestras ciudades forman parte del elenco vergonzoso entre las más violentas del mundo”.

El fenómeno de la violencia tiene orígenes multifactoriales, se lee en el documento, por lo que se ha hecho cada día más complejo y no se puede seguir explicando como consecuencia de enfrentamientos entre bandas criminales. Desgraciadamente este fenómeno se ha ido extendiendo hacia nuevos ámbitos políticos y sociales. Necesitamos el resultado de las investigaciones ministeriales para conocer el significado de las ejecuciones de actores políticos, lo mismo que de periodistas y de defensores de derechos humanos. Resulta también extremadamente grave tanto el crecimiento como la extensión geográfica de los feminicidios y de otras acciones violentas contra las mujeres.