Malta: el arzobispo Scicluna se reúne con quienes solicitan asilo

Isabella Piro – Ciudad del Vaticano

La necesidad de acoger a las personas con una "gentileza inusual" aún está viva hoy en día: así lo dijo el arzobispo de Malta, monseñor Charles Scicluna, al encontrarse, el pasado 21 de enero, con cincuenta y dos solicitantes de asilo que residen en el "Laboratorio de la Paz" de la isla. La " gentileza inusual" que el prelado mencionó se refiere al versículo " Nos trataron con una solicitud poco común" (Hch 28, 2), que fue elegido como tema de la Semana de oración por la Unidad de los cristianos de este año, que concluirá el próximo 25 de enero. Precisamente las Iglesias cristianas de Malta y de Gozo redactaron el tradicional texto de apoyo y profundización, también para conmemorar la fiesta del naufragio de San Pablo, que se celebra en la isla el 10 de febrero.

Monseñor Scicluna cita el episodio del naufragio de San Pablo

"Siéntanse bienvenidos" les dijo monseñor Scicluna a los solicitantes de asilo, que provienen en su mayoría de países africanos como Malí, Etiopía, Eritrea, Costa de Marfil, Sudán y Camerún, mientras que otros provienen de Bangladesh, Pakistán e Irán. Y citando el episodio del naufragio de San Pablo narrado en los Hechos de los Apóstoles, añadió: "La Biblia no nos dice lo que dijo Pablo. Nos cuenta lo que hicieron los malteses: vieron a personas que tenías miedo, que tenías frío, que estaban mojadas y encendieron un fuego. Las acogieron", con ""gentileza inusual". Monseñor Scicluna, antes de invitar a todos a la oración, reafirmó:

De ahí el mensaje "de esperanza" que el prelado dirigió a los solicitantes de asilo:

El "Laboratorio de la Paz" de Malta para los migrantes

Titulado en honor de San Juan XXIII y situado en el área de Hal Far, el "Laboratorio de la Paz" de Malta es una organización de voluntariado activo en la isla desde hace muchos años. Fue fundado en 1971 por el fraile franciscano Dionisio Mintoff y constituye un centro que lleva a cabo una labor educativa en favor de la justicia y de los derechos humanos, mediante la promoción de la solidaridad y de los valores cristianos. Además de la acogida de los solicitantes de asilo, este Laboratorio ofrece servicios médicos gratuitos y alberga una biblioteca y un Internet point  para que los migrantes puedan mantenerse en contacto con sus familias de origen. Además, todas las semanas se produce un podcast de radio sobre los temas de la paz y del desarme.