Marcha contra la trata de personas: un flagelo “que explota a los más débiles”

Ciudad del Vaticano

El pasado fin de semana estuvo marcado por la promoción de la Jornada Mundial de oración y reflexión contra la trata de personas. Instituida por voluntad del Papa Francisco que, en el año 2014, encargó a la Unión Internacional de Superioras y de Superiores Generales (UISG/USG) promover dicha jornada, el 8 de febrero, en la memoria litúrgica de Santa Josefina Bakita, patrona de todas las personas víctimas de la trata. La primera jornada mundial de oración contra la trata fue celebrada el 8 de febrero de 2015. Desde entonces, año tras año se busca concientizar a las personas frente a tal problema social.

En respuesta a este problema social, las Superioras y de Superiores Generales decidieron crear Talitha Kum, una red mundial de la vida consagrada comprometida contra la trata de personas que busca favorecer la colaboración y el intercambio de información, a mujeres y hombres consagrados.

Jornada de oración y reflexión contra la trata

Este año, nuevamente las consagradas y consagrados de Talitha Kum fomentaron la Jornada de Oración y Reflexión, durante la cual especialmente el sábado 8 de febrero organizaron una vigilia de oración en la Basílica de Sant'Antonio da Padova en Laterano, Roma.

En el domingo 9 de febrero, nuevamente los religiosos, acompañados de familias y de otros grupos, se dieron cita frente al Castel Sant’Angelo para participar en la marcha “Juntos contra la trata”. Estuvieron presentes Carmen Bandeo, misionera de Siervas del Espíritu Santo, y María del Rosario Peña, religiosa de las Dominicas de Santa Catalina de Siena, recalcando la importancia de participar en dicho evento para poder sensibilizar a muchos, ya que muchas veces no se cuenta con la información necesaria de este gran problema.

En la marcha, también participaron miembros de la Acción Católica, los cuales se encuentran en Roma celebrando su Foro Internacional. Rafael Ángel Corso, Presidente de la Acción Católica Argentina, declaró “que la evangelización y la promoción humana son dos caras de la misma moneda”. La lucha por una vida digna para todos nace desde la fe, “porque Jesucristo con su evangelio nos trajo alegría de la vida digna y plena para todos”.

Un flagelo “que explota a los más débiles”

La marcha concluyó con la asistencia al Ángelus en la Plaza San Pedro, donde el Pontífice subrayó que la trata es un verdadero flagelo “que explota a los más débiles”, siendo necesario “el compromiso de todos: instituciones, asociaciones y agencias educativas”. El Papa señaló que hoy en día los promotores de la trata utilizan cada vez más los medios de comunicación para delinquir, “por consiguiente, es necesario, por una parte, educar a las personas sobre el uso saludable de los medios tecnológicos y, por otra, vigilar y recordar a los proveedores de esos servicios telemáticos sus responsabilidades”.