Argentina. Obispos: responsabilidad y cuidado se oponen a miedo y pánico

Alina Tufani – Ciudad del Vaticano

“Cuidarnos a nosotros mismos de un modo responsable es la mejor manera de cuidar a los demás”. Con estas palabras, los obispos de la Conferencia episcopal argentina, llaman a asumir la emergencia causada por el Covid -19 con responsabilidad y sin temores. “Creemos que la responsabilidad y el cuidado se oponen al miedo y al pánico” dicen los obispos al explicar que el miedo nos lleva a pensar de manera egoísta y a tener “actitudes antisociales, sin pensar en los demás”.

En este contexto, los obispos argentinos exhortan a mirar a los sectores más necesitados y vulnerables que ahora deben enfrentar los embates de esta pandemia. “En los más de 4.400 barrios carenciados del país – se lee en la nota  - viven varios millones de personas. A estas personas no les va a resultar muy fácil quedarse en sus casas ya que necesitan salir para ganar el pan para sus familias día por día”. Por ello, el episcopado llama a cambiar estilos de vida y hábitos de consumo optando por vivir con una mayor austeridad, de una manera más sencilla y simple.

En su mensaje, los obispos invitan a vivir esta crisis como una oportunidad para crecer como personas y como sociedad, y recuerdan el llamado del Papa emérito Benedicto XVI a una nueva “imaginación de la caridad”, a una caridad y servicio al prójimo “creativos”. “El distanciamiento social como medio de prevención puede estar acompañado de una gran cercanía espiritual de modo que aunque físicamente aislados, nadie se sienta solo”. Es así como el uso de las redes sociales, para los obispos argentinos, puede ayudar a esa “creatividad” en la caridad para comunicar y sostener en la esperanza y para  generar nuevos modos de ayuda mutua y de compañía.

Por último, el episcopado argentino invita a vivir una Cuaresma muy especial apoyados en la gran fuerza de la oración pidiendo por los enfermos y sus familiares. “Queremos agradecer especialmente a quienes están sirviendo a los enfermos y a los más pobres: al personal sanitario, médicas y médicos, enfermeras y enfermeros, voluntarios de la pastoral de la salud presentes en esta hora compleja y apremiante, a todos llegue nuestro aliento y la seguridad de nuestra oración”.

El presidente de Argentina, Alberto Fernández, anunció, ayer, jueves que toda la población deberá guardar un aislamiento obligatorio desde este viernes y hasta el 31 de marzo, para enfrentar la propagación del coronavirus, que ya afecta a 128 personas, de las cuales tres han fallecido. No obstante, el Decreto de Necesidad y Urgencia permitirá a los ciudadanos comprar artículos de primera necesidad en negocios en almacenes, supermercados o farmacias, que permanecerán abiertos. El gobierno había ya implementado otras medidas como la suspensión de clases escolares, el cierre de fronteras, la promoción del trabajo a distancia y la cuarentena obligatoria para viajeros llegados de países con gran propagación del virus.

Por su parte, las distintas diócesis y arquidiócesis aportarán a sus fieles las orientaciones necesarias para respetar las disposiciones del decreto de emergencia nacional, como la suspensión de las celebraciones con asistencia de fieles, la dispensa del precepto dominical, la disponibilidad de ayuda material y espiritual, en particular a los más pobres, enfermos y ancianos.