50° años del Ordo Virginum: una vocación milenaria más viva que nunca
Sofía Lobos - Ciudad del Vaticano
El Ordo Virginum, también conocido como el Orden de las Vírgenes Consagradas, es un ritual considerado como una de las primeras formas de vida consagrada femenina en la Iglesia: hablamos de una vocación cuyo origen se remonta a los inicios del cristianismo y por medio del cual las mujeres, sin abandonar sus hogares, se entregaban totalmente a Jesucristo y a la misión evangelizadora.
Tal como explica la historia de la Iglesia primitiva, con el paso del tiempo, "este ritual dio lugar a otras formas de vida religiosa como los monasterios o la vida en comunidad", y no volvería a cobrar fuerza "hasta después del Concilio Vaticano II".
Hace 50 años se renovó el Ritual de las Vírgenes Consagradas
Concretamente el 31 de mayo de 1970 con el apoyo del Papa Pablo VI, se "promulgó el renovado rito de las Vírgenes Consagradas retomando así una de las vocaciones religiosas más antiguas".
Han pasado ya 50 años, por tanto, de la institución del Ordo Virginum y Vatican News entrevista a una de sus miembros: María Concepción Peral Bueno, más conocida como Hermana María, de las Vírgenes Consagradas de la Archidiócesis de Madrid, y enfermera de profesión, quien en esta pandemia trabaja en primera línea atendiendo a pacientes con coronavirus en el Hospital Clínico de la capital española.
La esencia de una vocación de servicio y entrega
Pero... ¿cuál es la esencia de esta vocación de servicio y entrega que existe entre las mujeres desde hace miles de años? ¿A qué se dedican las Vírgenes Consagradas en el mundo moderno de hoy? ¿Cómo enfrentan ellas, desde la fe, esta pandemia que ha marcado nuestra historia como humanidad? Estas son algunas de las preguntas que formulamos a nuestra entrevistada.
"Nuestra esencia es el Evangelio. Allí es donde las consagradas encontramos la fuente inagotable del gozo que da sentido a la vida, la orientación del camino y siguiendo a Cristo abrazamos su estilo de vida casta, pobre y obediente", explica la Hermana María subrayando que dedican su tiempo a la oración, la penitencia, la realización de obras de misericordia y de apostolado, dependiendo de la formación y el carisma de cada Hermana.
Debido a la pandemia del coronavirus, la reunión internacional por el 50° aniversario del Ordo Virginum, prevista para este mes de mayo en Roma, tuvo que ser cancelada. Preguntamos a la Hermana María ¿con qué actitud enfrenta una consagrada este tiempo de crisis sanitaria?
- ¿Qué papel, en la Iglesia y en la sociedad mundial, desempeñan las integrantes del Ordo Virginum actualmente, en medio de estos tiempos "modernos" donde la relación entre el ser humano y Dios no parece ocupar el primer puesto en la vida de las personas?
Nuestra entrega a la Iglesia se manifiesta al reconocernos marcadas a fuego por la misión de iluminar, de bendecir, de vivificar, de levantar, de sanar y de liberar la pasión por el anuncio del Evangelio para la edificación de la comunidad cristiana y para su testimonio profético de comunión fraterna, de amistad ofrecida a todos, de proximidad atenta a las necesidades materiales y espirituales de los hombres de nuestro tiempo y del compromiso en buscar el bien común en toda la sociedad.
Finalmente, la Hermana María se despide con un mensaje de esperanza para todos los que escuchan esta entrevista en este tiempo de sufrimiento.
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