Uruguay: En Pentecostés la Iglesia renovará su profesión de fe

El Credo Niceno-Constantinopolitano será pronunciado en cada parroquia en el país, cada domingo, y como signo de renovación de la fe y en preparación del camino hacia el V Congreso Eucarístico Nacional de Uruguay que tendrá lugar en octubre de 2020 en Montevideo

Alina Tufani – Ciudad del Vaticano

La iniciativa de renovar la Profesión de fe ya había sido anunciada por los Obispos de Uruguay, en una carta publicada el pasado 26 de febrero, Miércoles de Ceniza, en la que recordaban que la unidad de la fe se expresa en el Credo, es decir, todo lo que creo “como verdadero porque Dios lo ha revelado”.

El Credo Niceno-Constantinopolitano

Los Obispos explican en su carta que empleo del Credo Niceno-Constantinopolitano en las misas de preparación al Congreso Eucarístico se debe a que, entre otras cosas, en éste desarrollan más profundamente algunas dimensiones de la realidad de la fe, verdades muy importantes que han de ser conocidas explícitamente y creídas por el Pueblo de Dios y, además, porque es el propio de la Liturgia Eucarística. De ahí que expliquen:

“Se eligió el Credo Niceno-Constantinopolitano por su uso universal de la Iglesia en Oriente y Occidente, para evitar los errores o las omisiones en el reconocimiento de la divinidad de Jesucristo”

Carencias en el conocimiento de la fe

Al detallar otras particularidades del Credo Niceno-Constantinopolitano y su importancia para lograr una renovación de la fe, los Obispos reconocen que hoy en día, el Pueblo de Dios en Uruguay tiene “grandes carencias” en el conocimiento de la fe.

“Nos urge una reevangelización fundada en la verdad de Cristo y su obra, de la Santísima Trinidad y su comunicación en la Santa Iglesia”

“La Eucaristía: Sacrificio de Cristo que salva el mundo”

La Comisión Arquidiocesana del V Congreso Eucarístico Nacional, Sector Liturgia, elaboró un aporte para esta solemne renovación de la Profesión de fe. El tema del Congreso es: “La Eucaristía: sacrificio de Cristo que salva el mundo”; y el lema es su realización: "Tomen y coman: mi cuerpo entregado por ustedes". En este contexto, los Obispos uruguayos afirman:

“Desde la entrega de Jesús y su ofrenda centramos el objetivo que procuramos alcanzar: la renovación de le fe del pueblo de Dios que peregrina en Uruguay, de modo especial en el misterio eucarístico”

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