El libro “Luces para el camino” nace en compromiso con el Pacto Educativo Global
Ciudad del Vaticano
En pocos días tendrá lugar el evento mundial promovido por el Pontífice que tendrá como tema: “Reconstruir el pacto educativo global”. Se trata de un encuentro para reavivar el compromiso por y con las jóvenes generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e incluyente, capaz de la escucha paciente, del diálogo constructivo y de la mutua comprensión. Ante dicha convocatoria, la Oficina Internacional de la Educación Católica (OIEC) - junto con otros organismos y entidades - se ha movilizado para recoger las opiniones de diferentes personas del mundo de la educación, de los superiores generales de instituciones religiosas dedicadas a la educación y de expertos internacionales, sobre qué hacer para superar las dificultades y resistencias, qué cambiar en la educación para construir un mundo más humano, fraterno, solidario y sostenible y cómo centrarnos en las personas y educarlas integralmente desde dentro.
El nuevo libro “Luces para el camino” recoge proyectos y programas que muestran el camino y evidencian que es posible mejorar el derecho a la educación, construir la cultura de paz o tejer la solidaridad o el cuidado de la Casa Común. “Este libro participativo ha sido creado como un espacio de encuentro y de diálogo, para aportar luces para el camino hacia el pacto educativo global. Es un libro abierto, incompleto, que persigue inspirar a todos, contagiaros, para animaros a compartir vuestras visiones, para dialogar, debatir, buscar y trabajar juntos, desde cualquier rincón del mundo” escribe el Director de Proyectos de la Oficina Internacional de la Educación Católica, Consultor de la Congregación de la Educación Católica del Vaticano Juan Antonio Ojeda Ortiz, en la introducción del ejemplar.
Además, explica, “se trata de construir juntos una educación de, con y para todos. La educación compete a todos, pues les afecta por igual. De ahí que les debamos dar voz y capacidad de decisión a cada una de las partes afectadas, para generar juntos un proyecto educativo que no excluya a nadie, sino que incluya a todos”.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí