Austria: Un año dedicado a San Pedro Canisio a 5 siglos de su nacimiento
Ciudad del Vaticano
El 8 de mayo de 2021 se celebrará el quinto centenario del nacimiento de San Pedro Canisio, sacerdote de la Compañía de Jesús, Doctor de la Iglesia y figura destacada de la Reforma Católica en el siglo XVI. Holandés de nacimiento, fue el primer jesuita de la Provincia Alemana y su superior provincial de la misma y precisamente en cualidad de superior fundó el Colegio Jesuita de Innsbruck.
Es aquí, en Innsbruck, la capital del Tirol austriaco y de la que San Pedro Canisio es el santo patrono, donde comenzarán oficialmente las celebraciones del centenario el 10 de enero. El obispo la ciudad, Hermann Glettler, inaugurará el "Año Canisiano" con una misa que será transmitida por la radio nacional.
500 años del nacimiento de San Pedro Canisio
No será un año de grandes acontecimientos - explica la página web de la diócesis de Innsbruck - sino de "500 Fuegos del Corazón", pequeños testimonios de fe y de caridad que todos los fieles están invitados a realizar en sus diversos campos.
Esta es una oportunidad para poner en práctica el ejemplo de Pedro Canisio, un santo que creyó "con el corazón", pero también un hombre de acción y un testigo activo de la fe, especialmente en el campo de la educación, como lo demuestran sus importantes escritos y la fundación de muchos centros educativos jesuitas en las regiones alemanas en tiempos particularmente difíciles como los de la Reforma Protestante.
Compartir el tesoro de la fe
"Incluso hoy", subraya el comunicado, "se necesita un nuevo impulso y una nueva dinámica para transmitir la fe. Por lo tanto, la diócesis se propone "promover iniciativas que representen la diversidad y la vitalidad de la vida de la Iglesia para que tengan un efecto duradero y apoyen a las personas en los desafíos de la vida cotidiana, apoyar proyectos que miren más allá de los horizontes de la Iglesia" y desarrollar nuevas iniciativas, pero también mejorar las ya existentes.
"Como Iglesia, no queremos escondernos, sino atrevernos a hacer algo nuevo para compartir el tesoro de la fe con tantas personas como sea posible. Hacemos esto con la voluntad de aprender unos de otros", explicó Monseñor Glettler.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí