Crisis en Colombia. Obispo de Buga manifiesta su rechazo a cualquier forma de violencia

Cumpliéndose un mes del inicio de las protestas en Colombia, en una carta dirigida a los sacerdotes y a todo el Pueblo de Dios que peregrina en las Diócesis de Buga y Cartago, Mons. Ospina Leongómez ha manifestado su cercanía y acompañamiento a las víctimas de los desmanes que se han cometido también en el municipio de Tuluá, en los últimos días, en donde en medio de las protestas incesantes se vivió una noche de terror y caos en la que se redujo a escombros el Palacio de Justicia.

Rechazando “cualquier forma de violencia o atropello a la dignidad humana y al derecho a vivir dignamente”, de donde sea que provenga, el prelado interpela a los fieles si la situación que se vive “no desvela el fracaso” de “una sociedad que hace rato perdió el norte moral” y de una población “que cree resolver sus problemas al margen de Dios”. 

De ahí que el también Administrador Apostólico de Cartago realice dos llamamientos: el primero “a los sacerdotes”, para que no dejen de organizar jornadas de oración al dueño de la Historia para que tenga misericordia de la patria, sean puentes de diálogo y acercamiento entre todos, a “oírse”, “entender” los reclamos, “buscar” salidas, de modo que todos puedan sentirse parte de la solución, sin seguir atizando “el fuego de la intolerancia o de la discriminación”. El segundo llamamiento es “a todas las personas de buena voluntad” que “queriendo construir un país mejor, puedan aportar presencia, ideas, escucha, respeto a cada ser humano cualquiera que sea su forma de pensar o de actuar”.