Francisco inaugura la 74° Asamblea General de los obispos de Italia

Ciudad del Vaticano

Seminarios, tribunales eclesiásticos y Sínodo. Estos son los tres temas que el Papa Francisco abordó con los obispos italianos al inaugurar la 74ª Asamblea General, que se celebrará del 24 al 27 de mayo en el Hotel Ergife Palace de Roma. 

"Anunciar el Evangelio en un tiempo de renacimiento - Iniciar un camino sinodal" es el tema elegido por la Asamblea, que también tendrá la tarea de elegir a dos vicepresidentes, para la zona Norte y la zona Centro, así como a los miembros del Consejo de Asuntos Económicos y a los presidentes de las Comisiones Episcopales.

Antes de proceder a las preguntas y respuestas, el Papa se detuvo a reflexionar sobre estos puntos. En cuanto al Sínodo, el Pontífice recordó que este debe empezar desde abajo, en las pequeñas comunidades, en las parroquias. Un proceso que requerirá paciencia y trabajo, haciendo que la gente hable, y que "salga la sabiduría del pueblo de Dios". En este camino sinodal al que el Papa Francisco ha exhortado a la Iglesia italiana, es central retomar las líneas trazadas en la conferencia de Florencia de 2015, "una herencia" que debe "iluminar este momento", por lo tanto, "no hay que perder la memoria".

El Papa también señaló el peligro de "cometer errores en la formación" y "en la necesidad de ser prudentes en la admisión de los seminaristas". 

Asimismo, el camino sinodal de la Iglesia italiana también estuvo en el centro de las palabras de saludo del cardenal Gualtiero Bassetti, presidente de la CEI. "Su Santidad", dijo el purpurado, "en este camino le pedimos su aliento, su oración y su paternal bendición".

A continuación, el cardenal Bassetti hizo referencia al documento del Sínodo de los Obispos para implicar más al pueblo de Dios, que "nos apoya" en el proceso que "queremos iniciar". 

"Un proceso que comienza desde abajo para involucrar al Santo Pueblo de Dios", concluyó.