Obispos Haití: el referéndum es impensable en medio de la crisis

Isabella Piro - Ciudad del Vaticano 

El 27 de junio está previsto un referéndum sobre la Carta Fundamental, cuyas modificaciones, sin embargo, son objeto de perplejidad tanto por parte de las fuerzas de la oposición como de los círculos próximos al Jefe del Estado, Jovanel Moise.  La reforma, de hecho, acentuaría los poderes del propio presidente, que ha sido objeto de numerosas protestas populares desde octubre de 2019 porque se le acusa de corrupción. Los disturbios han obligado a posponer las elecciones legislativas previstas para enero de 2020, lo que ha llevado al gobierno a actuar mediante continuos decretos. La pandemia de Covid-19 ha agravado aún más la crisis social actual, causando cerca de 15 mil infecciones y más de 300 muertes. El clima de violencia en la isla es también trágico, debido a las bandas armadas, los llamados "escuadrones de la muerte" que siembran el terror por doquier, en un contexto de casi total impunidad.

"En estos momentos difíciles de nuestra historia como pueblo", escriben los obispos en un largo mensaje, "escuchamos los gritos de nuestros hermanos y hermanas, gritos provocados por males tan terribles como la multiplicación de bandas fuertemente armadas que hacen la ley e imponen sus dictados; la violencia en todas sus formas; los secuestros; la inseguridad que impide la libre circulación en el territorio nacional; la criminalidad; la impunidad; la inestabilidad política; el deterioro de las estructuras del Estado; el alto costo de la vida; la pandemia de Covid-19". Por ello, la CEH pide a los políticos de todas las tendencias que "eviten poner sobre los hombros del pueblo pesadas cargas que tengan como consecuencia frenar o incluso bloquear su camino hacia el pleno desarrollo".

Y entre estos lastres los obispos citan precisamente "el deseo de dotar al país, a toda costa, de una nueva Constitución, mediante referéndum". Pero lo que se necesita, en primer lugar, es "buscar la forma correcta y consensuada de lograr este objetivo" y "este no es el caso, por el momento". Decidir la sustitución de la Carta Fundamental, subrayó la CEH, no es posible "en medio de una crisis política en la que es difícil llegar a un acuerdo" y "perseverar en este punto sumirá al país en una crisis aún más grave", porque la actual situación social y política, hecha de "división, desconfianza y violencia de todo tipo", no es nada favorable "a un proyecto de esta envergadura, que implicaría más bien una colaboración entre todas las fuerzas nacionales". 

"Renunciar al proyecto de referéndum sería, por tanto, la decisión más acertada", explican los obispos a las autoridades, "les imploramos que eviten que el país viva días aún más oscuros y peores que los actuales". El pensamiento de los obispos haitianos se dirige, pues, a la población que "no puede esperar más para ver a la nación salir de la pobreza, la inseguridad, la inestabilidad y la anarquía crónica". De ahí la exhortación a "trabajar urgentemente, de forma inmediata, por la paz y por un cambio profundo", relanzando "sin demora el proceso democrático que permita a los ciudadanos elegir a sus dirigentes legítimos mediante elecciones libres y transparentes".

La CEH también insta a todos los haitianos a "no dejarse robar la esperanza de un futuro de paz y de participación en la construcción de la democracia". "¡Haití vivirá!", concluye el mensaje episcopal que finalmente confía el país a la intercesión de su Patrona, Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.