La cruz y el icono de la JMJ visitan la Conferencia Episcopal Española

Hoy, miércoles 29 de septiembre, tuvo lugar en la sede de la Conferencia Episcopal Española en Madrid una visita muy esperada e importante: la de la cruz y el icono de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). Poco después de las 9 horas, un grupo de jóvenes, junto con el director del secretariado de la Subcomisión Episcopal de Juventud e Infancia del Episcopado, Raúl Tinajero, llevaron estos dos símbolos para colocarlos en las peanas frente a la imagen de la Virgen.

A los pies de Nuestra Señora, precisa el sitio web del Episcopado español, les esperaban los obispos miembros de la Comisión Permanente -reunida en Madrid los días 28 y 29 de septiembre- a los que monseñor Américo Aguiar, obispo auxiliar de Lisboa y presidente de la Fundación Lisboa 2023, dirigió su discurso, destacando tres palabras en particular: homenaje, gratitud y bendición.

La primera palabra, homenaje, se refiere al  trabajo que hacen con los jóvenes españoles para encontrarnos todos en el verano de 2023"; la segunda palabra, gratitud, “por el apoyo fraterno y la acogida de estos iconos en su peregrinaje por las diócesis españolas”. Y la tercera, “la bendición para todas las diócesis y los jóvenes de España”. "Portugal es pequeño, somos pocos", continuó el obispo auxiliar de Lisboa pidiendo a los obispos españoles su apoyo y colaboración para que la JMJ 2023 sea un verdadero "encuentro ibérico". El prelado recordó entonces cómo en Sídney, en 2008, cuando se anunció que Madrid sería la sede de la JMJ, se oía a los jóvenes gritar: "Sí, sí, sí, vamos a Madrid". Y les pidió que cambiaran ese texto y dijeran "Sí, sí, sí, que vamos desde aquí".

Por su parte, el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José Omella, en nombre de los obispos españoles, respondió a la invitación de monseñor Américo Aguiar recordando que "somos comunión todos". “Estamos haciendo realidad ya la Iglesia sinodal, comunión unos con otros”, precisó el presidente de los obispos españoles, recalcando a continuación: “no importa el número si al final somos hermanos y somos hijos de Dios. Estamos encantados de caminar con vosotros preparando esta Jornada Mundial de la Juventud”.

El también arzobispo de Barcelona destacó que la visita de la cruz y el icono por las diócesis españolas "nos hace caer en la cuenta de que somos una Iglesia hermana con la de Portugal y que caminamos bajo la misma mirada de la Virgen y del Señor". “La Iglesia sinodal -subrayó- es participación, con lo cual todos participamos, los jóvenes, los obispos, los sacerdotes, cada uno desde su función" con el fin de evangelizar nuestra península ibérica y el mundo.

Así, antes de concluir su intervención, recordó el “gran número de misioneros que ha salido de la península ibérica”. “Pidamos al Señor – expresó – que nos ayude a renovar este ardor misionero".

Después de las palabras del cardenal Omella, los obispos, junto con el resto de los presentes, rezaron juntos la oración por la JMJ de Lisboa 2023.