Nota Eclesial: El apostolado del oído
Pbro. Johan Pacheco – Vatican News
La escucha del otro es la mejor forma de iniciar una buena y sana relación humana, y que acrecienta los valiosos fundamentos cristianos entre las personas. Es el “apostolado del oído” que conlleva el encuentro, la paciencia y el respeto.
En la memoria litúrgica de San Francisco de Sales, fue publicado el Mensaje para la Jornada Mundial para las Comunicaciones Sociales: “Escuchar con los oídos del corazón”, y el Papa Francisco describe la importancia de ser buenos receptores, escuchas de las maneras de comunicar del prójimo, dejando a un lado la tentación del egocentrismo limitado las voces de los demás.
Para ello el Santo Padre recuerda el estilo humilde de Dios que “inclina el oído” para escuchar a su pueblo: “Es aquella acción que permite a Dios revelarse como Aquel que, hablando, crea al hombre a su imagen, y, escuchando, lo reconoce como su interlocutor”.
En el mensaje recomienda claramente: “sólo prestando atención a quién escuchamos, qué escuchamos y cómo escuchamos podemos crecer en el arte de comunicar”.
La actualidad golpeada por la pandemia, la crisis económica, la precariedad de la educación, la infodemia, y las amenazas de guerra, tenemos el “apostolado del oído” como una herramienta fundamental para comunicar adecuadamente la verdad sin ocasionar daños a la persona, como ocurre lamentablemente en las redes sociales y medios de comunicación.
En un reciente encuentro del Papa con el Consocio de Medios Católicos "Catholic Fact-Checking", también recordó “que como cristianos estamos contra la injusticia y la mentira, pero siempre a favor de la persona”. Para distinguir así, que, aunque se combate la desinformación y las noticias falsas, por caridad cristiana “siempre hay que respetar a las personas”.
El “apostolado del oído” como acción pastoral nos ayudará siempre adoptar el estilo del Evangelio, creando puentes, siendo artesanos de la paz, caminado al encuentro del otro, para escucharlo, a veces con paciencia, y siempre con respeto.
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