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El padre Verna Cineus (al centro)  se reúne con el pueblo de Haití El padre Verna Cineus (al centro) se reúne con el pueblo de Haití 

Haití, un año después del terremoto. Padre Cineus: "La gente sigue sufriendo"

El 14 de agosto de 2021, un potente temblor sísmico puso de rodillas al país caribeño, causando miles de muertos, heridos y desplazados. La queja del padre Verna Cineus, religioso camilo: "Nadie nos ayuda. Aquí falta de todo: los ancianos y los niños son los más afectados". La violencia de las bandas armadas que asolan las ciudades hace más dramática la situación

Federico Piana- Ciudad del Vaticano

"Nada ha cambiado, seguimos sufriendo aquí como hace un año". El dolor del padre Verna Cineus es insoportable, al recordar los trágicos momentos de aquel terrible 14 de agosto de 2021, cuando un terremoto de 7,2 grados de magnitud mató a miles de personas, destruyó innumerables casas e instalaciones públicas, y también desplazó a decenas de miles, que nunca volvieron a su tierra.

Población abandonada

El sacerdote, un religioso camilo que dedica su vida a los pobres en la capital, Puerto Príncipe, denuncia enérgicamente que la población no ha recibido ninguna ayuda desde entonces: "Las autoridades locales y la comunidad internacional no han dado ninguna respuesta a nuestra gente que sigue muriendo porque nos falta de todo: comida, agua, gasolina para hacer funcionar las escuelas y los hospitales. Y los más afectados son los niños y los ancianos: "Hay casi cuatro millones que ni siquiera tienen una comida al día", dice el padre Cineus.

Calles destruidas en Haití
Calles destruidas en Haití

No hay seguridad

Las asociaciones de voluntarios de la Iglesia y las ONG que consiguen aportar algo de ayuda tienen que enfrentarse a una situación de inseguridad social que genera una violencia extrema. "Las bandas armadas, a menudo enfrentadas entre sí", explica el clérigo, "controlan gran parte del país y resulta difícil desplazarse de una zona a otra para llevar alimentos o ir a buscarlos. Es un país completamente destruido".

El dolor de la Conferencia Episcopal

La Conferencia Episcopal local intervino enérgicamente contra las bandas que hacen estragos, hundiendo a una población que también lucha contra la pobreza crónica y la marcada corrupción. Estamos asombrados e indignados", escribieron los obispos haitianos en un largo mensaje, "por la impotencia del Estado. Unimos nuestras voces a las de todos los que aspiran a la seguridad y la paz". El padre Cineus explica que los obispos querían denunciar "el recrudecimiento de la violencia, que ha quedado impune, y que hace quince días también afectó a Puerto Príncipe. Aquí las bandas armadas han llegado a atacar y dañar incluso la catedral. Estamos realmente desesperados".

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16 agosto 2022, 10:57