Iglesia de Chile llama a construir un país justo y solidario
Vatican News
“Hoy más que nunca necesitamos sentirnos convocados por aquellos valores y principios que nos permiten construir una fraternidad, donde todos nos sentimos parte de un destino común, donde más allá de las diferencias somos convocados a vivir en justicia, paz y libertad”. Fueron las palabras de Monseñor Ricardo Morales, obispo de Copiapó, en el Mensaje con motivo de la celebración de las Fiestas Patrias.
El texto – como reporta el sitio web de la Conferencia Episcopal de Chile - fue leído en el curso de la celebración eucarística y Te Deum que, como es tradición, tiene lugar el domingo 18 de septiembre, con ocasión de la celebración de las Fiestas Patrias en Chile, en conmemoración del aniversario de la Primera Junta Nacional de Gobierno de 1810. Este año, la celebración fue presidida por el Vicario General, el P. Enrique Balzán, pues Monseñor Ricardo Morales, se encuentra en Roma participando en un curso para obispos recién ordenados.
Aportar a la construcción del diálogo y respeto mutuo
Palabras de agradecimiento a Dios por el país y sus valores, abrieron el mensaje del Obispo de Copiapó en el que constata cómo los problemas de los más pobres están lejos de ser solucionados, así como la falta de justicia, la discriminación y la violencia.
“Como hombres y mujeres de fe”, el prelado llamó a aportar a la construcción del "diálogo y respeto mutuo" a ser “artífices de unidad, de esperanza y alegría en el Señor”, aún en medio de las dificultades.
La nueva Constitución
Continuando con el mensaje, monseñor Morales se refirió al sentido religioso de la patria, es decir, “la certeza que el camino no lo hacemos sólo en una visión horizontal, sino también vertical, orientados hacia Dios”.
Migrantes y mujeres en las tomas
El obispo de Copiapó recordó asimismo que no se puede construir un país justo y solidario si no se tienen en cuenta a los más débiles, a los “descartados”. “Me gustaría solo mencionar dos, que desde nuestro trabajo como obispado descubrimos. Los migrantes y las mujeres en las tomas”, dijo.
Sobre la migración, mencionó la dura realidad de las familias extranjeras, y señaló que “la nueva ley de migraciones, en vez de ayudar, ha hecho cada vez más difícil regularizar la permanencia legal de quien llega a Chile buscando refugio y comida, son niños, mujeres, ancianos, que no encuentran en nuestra patria esa acogida que esperaban”. Por ello, pidió “humildemente a quienes puedan hacer algo para mejorar la ley y los procedimientos que se refieren a migración, que por favor lo hagan”.
Refiriéndose a la “otra pobreza”, la de las mujeres, especialmente en las tomas, evidenció “que deben lidiar con precarias condiciones de vida para su familia”. La precariedad - precisó - " se vive también en la violencia” que muchas mujeres sufren en silencio en el seno familiar.
Servicio público
En la parte final del mensaje, hablando del trabajo de cada uno y en particular de aquel de los servidores públicos, expresó:
Conozco a las autoridades de nuestra región y sé que se mueven por un genuino servicio al país y a los más pobres, y que con sacrificio postergan a sus familias por la entrega en el servicio público
En la conclusión, monseñor Morales invitó a todos a ponerse al servicio “especialmente de los pequeños y sencillos”, confiando estas intenciones a la intercesión de la Virgen María.
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