Líbano. ACN lanza el programa "Vuelta al colegio"
Roberta Barbi - Ciudad del Vaticano
En el Líbano hay unos 185.000 alumnos, tanto cristianos como musulmanes, de entre 6 y 18 años, que asisten a las 250 escuelas católicas del país, que desempeñan un papel fundamental tanto en la educación como en "las relaciones entre cristianos y musulmanes, que son un ejemplo de convivencia aquí para todo Oriente Medio", explicó Philipp Ozores, secretario general de ACN Internacional. La campaña "Vuelta al cole" lanzada por la Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) pretende apoyar a unos 30.000 jóvenes y 6.000 profesores.
Uno de cada 10 niños abandona la escuela
Según datos de la ACN, uno de cada diez niños libaneses ha abandonado la escuela en el último año debido a la emigración y a la falta de recursos económicos. Mantener las escuelas abiertas en el país es, por tanto, una condición necesaria para la continuidad de la presencia cristiana: "En el Líbano, el catecismo se imparte principalmente en las escuelas católicas, no tanto en las parroquias", afirma Alessandro Monteduro, director de ACN Italia, "si las escuelas y los profesores católicos empiezan a desaparecer por falta de medios económicos, el equilibrio demográfico cambiará rápidamente".
Una situación económica nada fácil
De hecho, la situación económica del Líbano, ya precaria tras la dramática explosión de Beirut en 2020, está ahora en peligro debido al aumento de los precios de la energía, y el empeoramiento de las condiciones de muchas familias ha hecho imposible que muchos padres puedan pagar las tasas escolares. Además, desde el punto de vista energético - hace saber ACN - el suministro en el Líbano ya escasea desde hace tiempo, hasta el punto de que muchas escuelas han tenido que recurrir a generadores privados para hacer frente a los frecuentes cortes de luz, lo que ya suponía un gasto importante incluso antes de la crisis energética.
Una campaña de más de dos millones de dólares
En total, los fondos recaudados en la campaña "Vuelta al colegio" ascienden a más de dos millones de dólares, que se destinarán a cubrir las becas de las familias, los salarios de los profesores y las ayudas a los profesores católicos de las escuelas públicas en particular, así como las subvenciones para la compra de material y otros proyectos. Líbano es el único país árabe en el que los cristianos desempeñan un papel activo en la sociedad y la política - concluye ACN - y ha sido durante siglos un lugar de refugio para los cristianos perseguidos.
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