Cardenal Omella: La JMJ una gran experiencia de fraternidad

Johan Pacheco – Lisboa

La Iglesia en España ha tenido una numerosa participación en la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa, superando los 100.000 peregrinos presentes en Portugal, representando diversas entidades eclesiales del país. Entre las grandes experiencias que vivieron fue el encuentro con Cristo, asegura el arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española, cardenal Juan Omella.

EL Cardenal compartió la gran experiencia que vivieron los jóvenes españoles en la JMJ: “Es una gracia de Dios poder participar con los jóvenes de esa alegría que da no solamente el encontrarse entre ellos juntos, los amigos, con lo de otras diócesis, con los de otros países, que eso es un regalo ya, ensanchar el corazón y el horizonte”, dijo a Vatican News.

Sin embargo, Omella subraya que lo más importante ha sido “el encontrarse con Jesucristo, vivo, eso vibra, se nota que ellos están. Y el Papa les decía que había que amar a Jesucristo y que Él nos ama. Y lo gritaban y lo contestaban, repetían. Yo creo es una gran experiencia.  Experiencia de fraternidad, experiencia de comunión con todos y experiencia sobre descubrir que Dios nos ama, que nos acompaña, que está con nosotros y que nos da horizontes de esperanza. Estos jóvenes son realmente, pues esa gran semilla del futuro de una Europa nueva que son ellos son los que la van a construir”. 

Españoles “como en casa” en Lisboa

Por su parte, el sacerdote Raúl Tinajero -director de la Subcomisión de Infancia y juventud de la CEE- afirmó que la delegación española se ha sentido “como en casa”.  Y uno de los grandes mensajes que se llevan los jóvenes es entender que “son protagonistas y miembros vivos de la Iglesia, el Papa se los dijo, somos todos y esos todos también son ellos”.  

Sobre la continuidad del acompañamiento a estos jóvenes en España, señaló que los objetivos de la Pastoral Juvenil seguirán guiando “el acompañar a los jóvenes a que se encuentren con Cristo y puedan vivir su fe en comunidad, y a que se sientan corresponsables en el camino de la fe”.

Además, agradecieron a la Iglesia portuguesa y a las autoridades por las atenciones a los peregrinos; y al Papa Francisco por responder preguntas de jóvenes durante sus alocuciones y homilías.