Hermanas Apóstoles del Sagrado Corazón de Jesús actualizan sus Constituciones

Hna Débora Evangelina Vargas - Ciudad del Vaticano

El proceso de actualización, dio inicio a mediados del 2010, y con la aprobación recibida inició la entrega a todas las comunidades pertenecientes a esta congregación, que se extenderá hasta el mes de noviembre del año en curso.

El nuevo texto aprobado, muestra a las bienaventuranzas como el camino de santidad, la mansedumbre y humildad como características de la espiritualidad del Sagrado Corazón de Jesús. Su contenido se centra en la Eucaristía, la adoración al Santísimo Sacramento y los escritos que forman parte del legado espiritual de su fundadora, la Beata Clelia Merloni, beatificada recientemente en el año 2018.

La Constitución introducirá temas que conforman la identidad del apóstol, como es el perdón, la ternura, entre otros, como así también temas relacionados con el magisterio del Papa Francisco, entre los que se destaca el discernimiento, a nivel personal y comunitario.

Además, reforzará la importancia de la vida comunitaria, presentando un análisis teológico y fraterno de la misma, con un enfoque que se abre a la internacionalidad e interculturalidad. En el abordaje del carisma y de la finalidad del Instituto se delinea la fisonomía de su apostolado, su misión ad extra, como así también actualizar el lenguaje utilizados en los documentos eclesiales, relacionados a las formadoras, formación inicial y continua.

El magisterio de la Iglesia, en la Exhortación Apostólica Postsinodal Vita Consecrata -número 37- invita a los Institutos religiosos a reproducir con valor la audacia, la creatividad y la santidad de sus fundadores y fundadoras como respuesta a los signos de los tiempos que surgen en el mundo de hoy. Esta invitación es sobre todo una llamada a perseverar en el camino de santidad a través de las dificultades materiales y espirituales que marcan la vida cotidiana. En este espíritu, vuelve a ser hoy urgente para cada Instituto la necesidad de una referencia renovada a la Regla, porque en ella y en las Constituciones se contiene un itinerario de seguimiento, caracterizado por un carisma específico reconocido por la Iglesia.

La Beata Madre Clelia, fundadora del Instituto religioso, exhorta a sus miembros, a ser observantes de las santas Reglas, ya que las mismas, son no sólo una ayuda eficaz para quien quiere santificarse en la casa del Señor, sino también las columnas y el sostén de todo instituto religioso.