CEI: Un grito de paz contra una cultura adicta a la guerra

Roberta Barbi – Ciudad del Vaticano

Rezar por la paz, formarse para la paz, realizar gestos concretos de paz. Es la paz, la verdadera paz, la que hay que realizar concretamente, el leitmotiv que ha guiado las dos jornadas de reflexión de los obispos italianos encabezados por su presidente, el cardenal Matteo Maria Zuppi, arzobispo de Bolonia, y que acaban de concluir en Roma. Como medio para volver a educar a la paz ofreciendo caminos realmente alternativos a las lógicas dominantes, los obispos señalaron la "objeción de conciencia" y la recuperación de otras acciones experimentadas en el pasado "para dar perspectivas de futuro especialmente a los jóvenes".

Entre las acciones señaladas por los prelados, por tanto, "ser constructores de fraternidad" y favorecer el diálogo "en particular ecuménico e interreligioso con la sociedad y las instituciones". El cardenal Zuppi, en particular, citó el artículo 11 de la Constitución italiana, en el que se repudia la guerra tanto como ofensa contra la libertad de los demás pueblos como medio para resolver las controversias internacionales, e invitó este año más que nunca a participar en la tradicional Colecta por Tierra Santa que tiene lugar el Viernes Santo.

Iniciación cristiana y jóvenes

Parte de la reflexión de los obispos se centró en la figura de los padrinos y madrinas, hoy vaciados de significado, meros elementos de la tradición: "Urge repensar los caminos tradicionales", escribieron los obispos en el comunicado final de la sesión, "para redescubrir el papel de los padrinos y madrinas, pasando del concepto de 'padrinos' de un día a auténticos testigos en el crecimiento integral de las personas que reciben el Sacramento". Figuras, por tanto, que también deben "contribuir a la acción generadora y educativa de los padres, en sinergia con la comunidad eclesial".

También hay que repensar la relación con las nuevas generaciones, erróneamente consideradas alejadas de la fe, portadoras, en cambio, de nuevas necesidades de relación con la religiosidad y la espiritualidad: "Se está produciendo una transformación muy significativa en el modo de creer", afirman los obispos, "los jóvenes expresan también con su protesta silenciosa a la comunidad cristiana el deseo de un nuevo modo de entender al ser humano y la exigencia de una interpretación de la fe dentro de esta condición humana".

Camino sinodal y tiempo presente

El Camino sinodal, según los obispos, está mostrando la importancia de sintetizar las distintas sensibilidades: "Las diócesis han entendido el horizonte misionero como un estilo con el que abordar toda reforma eclesial". Por tanto, la fase sapiencial, es decir, la fase de discernimiento sobre lo que ha surgido en el bienio dedicado a la escucha, está llegando a su fin, y comienzan a esbozar lo que sucederá en la fase profética. A continuación, los obispos destacan algunos retos que exigen "clarividencia y valentía", en la convicción de que "el país no crecerá si no es juntos".

Entre ellos, la solidaridad y la subsidiariedad, así como la llamada a un desarrollo unificado para un crecimiento que anule las desigualdades: con este objetivo, Cáritas recibió el mandato de estudiar un proyecto de microcréditos sociales que se pondría en marcha con motivo del Jubileo, y que no "sólo apoyaría a los que tienen dificultades" desde el punto de vista económico, sino que incluiría "el acompañamiento de la persona".

Y precisamente sobre el tema de la atención a la persona, los obispos italianos retoman el tema del final de la vida, subrayando su preocupación por el hecho de que actualmente menos de la mitad de los pacientes tienen acceso a los cuidados paliativos. De ahí la necesidad de aumentarlos: "A pesar de que garantizan la dignidad", escriben los obispos, "apoyan al paciente y a sus familiares en su enfermedad, su aplicación sigue siendo en gran parte incumplida". Los obispos concluyen, por tanto, recordando "frente a una cierta derivación eutanásica" que "la vida es sagrada, siempre y en cualquier condición, y que no se puede jugar con ella".

Sobre la escuela de Pioltello el respeto religioso es importante

Al margen de la rueda de prensa con los periodistas, el secretario general de la Conferencia Episcopal Italiana habló de la escuela de Pioltello, en la provincia de Milán, que decidió cerrar el último día del Ramadán: "El respeto del hecho religioso es positivo – dijo – este respeto es típico del modelo italiano porque el laicismo italiano no suprime la identidad religiosa sino que la promueve".

Sin embargo, el prelado señaló que desconocía si en este caso concreto "se había respetado el proceso administrativo" porque, en cualquier caso, este tipo de decisiones deben producirse "en un contexto institucional de respeto a las normas y a los procedimientos". "Ciertamente respetamos la libertad religiosa, la misma libertad que exigimos para los cristianos en todas partes", continuó.

Sobre la investigación judicial en la diócesis de Ozieri, en la que también está implicado el obispo Corrado Melis, Baturi dijo: "Confiamos en que se puedan aclarar los elementos, pero podremos intervenir con más conocimiento de causa cuando tengamos más conocimiento de las acusaciones. Ciertamente hay la máxima atención – añadió – y estamos cerca de nuestro hermano en la oración".

Próximas citas y compromisos

Por último, los obispos recuerdan algunas citas importantes, como la 50ª Semana Social de los Católicos en Italia, que tendrá lugar en Trieste del 3 al 7 de julio sobre el tema: "En el corazón de la democracia. Participar entre la historia y el futuro". También está previsto un discurso del Papa Francisco para clausurar este evento.

También se presentó una actualización sobre el Consejo Mediterráneo de los jóvenes, querido por la Conferencia Episcopal Italiana para reforzar la acción pastoral ante los desafíos actuales: los días 3 y 4 de abril está prevista en Bruselas la reunión del Ejecutivo, acompañado por el secretario general, monseñor Baturi, el presidente de la Comisión de los episcopados de la Unión Europea, monseñor Crociata, y la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola. Por último, la asamblea general de los obispos italianos se celebrará del 20 al 23 de mayo en Roma sobre el tema "Camino sinodal: hacia la fase profética".