La Catedral de Barcelona renueva vitrales y cubiertas tras dos años de obras
Lucía Elvira – Ciudad del Vaticano
Tras dos años de obras, este miércoles 10 de julio, la Catedral de Barcelona ha inaugurado la restauración de sus vitrales y cubiertas. Con el paso del tiempo y la polución, estos elementos de la Catedral perdieron brillo y por esta razón, hace dos años, empezaron las obras para poder mejorar la experiencia de los visitantes. También se ha celebrado la apertura de su nuevo archivo digital que facilitará el acceso a la documentación histórica.
El proceso
Este proyecto ha implicado la restauración de doce vitrales que ocupan un total de 230 m², siendo este conjunto el más grande y bien conservado de los siglos XIV y XV. Durante el proceso, se desarmaron los componentes de piedra de los ventanales para retirar todos los elementos de hierro y vidrio. En los talleres, todas las piezas fueron desmontadas, reparadas y reforzadas para devolverlas a su apariencia original.
Nuevos elementos
Se han restaurado las azoteas y cubiertas de la catedral, ofreciendo así un nuevo mirador 360º con vistas al barrio Gótico y a la ciudad. En algunos tramos, se ha conservado el pavimento del S.XIV haciendo que los visitantes puedan disfrutar de una magnífica experiencia.
Asimismo, cabe destacar que la Catedral ha querido sumarse a la era tecnológica con la instauración de su archivo digital que permite el acceso a los documentos más antiguos del Archivo Capitular para poder explorar la rica historia del monumento. Todo aquél que quiera, será libre de consultar 933 documentos que suman un total de 179.791 páginas.
Todo esto ha sido posible gracias a la financiación de diversas instituciones: el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) del gobierno español, el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y la Oficina de Apoyo a la Iniciativa Cultural (OSIC) de la Generalidad de Cataluña. El coste total para llevar a cabo estas obras ha sido de 2.562.326 euros.
Esta restauración ha contribuido a la conservación y mejora del patrimonio artístico de la Catedral de Barcelona, uno de los principales iconos arquitectónicos de la ciudad. Este tipo de situaciones también sirve para educar a la generación futura sobre el patrimonio del que disponen.
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