XXI Encuentro Latinoamericano de Pastoral Juvenil en Paraguay

Lucía Elvira - Ciudad del Vaticano

El XXI Encuentro Latinoamericano de Responsables Nacionales de Pastoral Juvenil se celebra del 15 al 20 de julio en Asunción, Paraguay, con la participación de jóvenes líderes de 21 países de América Latina y el Caribe, además de delegaciones especiales de Corea, Portugal y representantes del Vaticano. El evento se centra en acercarse a las realidades de la región para fomentar una conversión en la práctica de la pastoral juvenil.

La inauguración oficial tuvo lugar el lunes 15 de julio con una peregrinación desde el ex Seminario Metropolitano hasta la Catedral de Asunción, seguida de una emotiva Santa Misa presidida por el Cardenal Adalberto Martínez y acompañado por el Nuncio Apostólico Mons. Vincenzo Turturro. Durante la homilía, el Cardenal expresó su agradecimiento a los jóvenes por su compromiso y los animó a vivir el amor y construir una civilización basada en este valor, destacando la importancia de enfrentar los desafíos que atraviesa la juventud en la región.

Un encuentro para la reflexión

El encuentro, inspirado en el evangelio de Lucas en su capítulo 7, busca retomar el camino recorrido por la pastoral juvenil latinoamericana, proporcionando un espacio para la reflexión, el diálogo y el aprendizaje mutuo. Emilce Cuda, secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina, expresó la importancia del discernimiento espiritual y comunitario y la necesidad de fortalecer los lazos con instituciones como el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño. Según Cuda, este proceso ha consolidado una relación que permite organizar la esperanza y traducir los aprendizajes en acciones concretas para la comunidad.

Los jóvenes: el presente de la Iglesia

Durante las sesiones, se han discutido diversas metodologías de trabajo, se han presentado grupos de trabajo y se ha recordado las palabras del Papa Francisco en lo que se refiere a los jóvenes. La secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina enfatizó la importancia de la participación activa y el diálogo entre los jóvenes líderes, ya que ellos son el presente de la Iglesia. El evento no solo busca intercambiar ideas y estrategias, sino también fortalecer los lazos de solidaridad y amistad entre los participantes. “La juventud que sigue a Jesús debe salir a nuestras calles de América Latina a tocar la carne sufriente de Cristo en el pueblo", ha declarado Emilce Cuda, subrayando la necesidad de una pastoral juvenil activa que trabaje en unidad con los líderes eclesiásticos y teólogos para discernir y actuar en comunidad.

Jóvenes, una Iglesia en salida

También monseñor Lucio Ruiz, secretario del Dicasterio para la Comunicación, compartió con los jóvenes comentándoles sobre la cercanía del pontificado del Papa Francisco llamando a ser una Iglesia en salida: “Cuando Francisco llega al pontificado nos trae un evangelio fresco, una vez le decía ‘me parece como leer el evangelio con olor a tinta fresca’ porque nos pone en contacto directo con el texto, con la palabra, con el camino de Jesús con sus discípulos. Esa frescura de un amor que se entrega, de un amor que se dona, de un amor que perdona, misericordeando. Sentirnos amados, perdonados, abrazados, y de eso se trata. En ese documento él tiene una frase —que en su momento escandalizó bastante— que dice ‘prefiero una iglesia lastimada, sucia, porque sale a misionar’ más que una iglesia enferma que se queda protegiendo-protegiéndose”.

Enfatizo monseñor Lucio Ruiz en que “la clave total de lo que es la invitación de Papa Francisco a toda la iglesia y en especial a ustedes, jóvenes, a ser una iglesia en salida, que se abre, que se cae, que se ensucia, que se lástima porque lleva a Jesús hasta las periferias existenciales donde hay un sufrimiento, la carne sufriente de Cristo de todas las maneras: físicas, psíquicas, intelectuales, amorosas… todas. Donde falte la luz de la esperanza de Dios”.

Las actividades programadas hasta el 19 de julio prometen ser una experiencia transformadora, impulsando a los jóvenes a trabajar juntos por un futuro más justo y esperanzador para todos los jóvenes de la región.