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El funeral de Monseñor Treanor en la catedral de Belfast El funeral de Monseñor Treanor en la catedral de Belfast  

Funeral del Nuncio Treanor: agradecimiento del Papa por su "devoto y fiel servicio"

Francisco envía su mensaje de condolencia por el fallecimiento, el pasado 11 de agosto, del representante del Vaticano ante la UE . El funeral en la catedral de Belfast fue presidido por monseñor McGuckian, quien recordó su compromiso con la promoción de la justicia en la relación fe-cultura y reiteró los principios de protección de la vida ante las "guerras que hoy se desencadenan ante nuestros ojos, especialmente en Gaza y Ucrania".

Antonella Palermo - Ciudad del Vaticano

En un mensaje firmado por el Secretario de Estado Parolin, el Papa agradeció a monseñor Noël Treanor, Nuncio Apostólico ante la Unión Europea, fallecido el 11 de agosto, su compromiso "devoto y fiel". El funeral tuvo lugar el 20 de agosto, en la catedral de San Pedro de Belfast. El entierro se realizó en la Capilla de la Resurrección de la misma iglesia. El rito fúnebre, presidido por monseñor Alan McGuckian, obispo jesuita de Down y Connor, tuvo como concelebrantes a monseñor Eamon Martin, arzobispo de Armagh y Primado de Irlanda (con su emérito monseñor Diarmuid Martin), la delegación vaticana con el cardenal Arthur Roche, Prefecto del Dicasterio para el Culto Divino, el Arzobispo Paul Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales, junto con el Arzobispo Luciano Russo, el Nuncio Monseñor Luis Mariano Montemayor y sus homólogos Michael Crotty (Nigeria) y Seamus Horgan (Sudán del Sur). Asistió una representación ecuménica de la Iglesia Presbiteriana, la Iglesia de Irlanda de la Abadía de Bangor y la Iglesia Metodista.

El agradecimiento del Papa por un "servicio devoto y fiel"

En el mensaje, leído durante el funeral por Monseñor Montemayor, el Pontífice expresa su cercanía espiritual a la familia de Monseñor Treanor, especialmente a su hermano John y a su hermana Mary. Cercanía extendida al clero, religiosos y fieles laicos de la diócesis de Down y Connor. "Expresando profunda gratitud por el devoto y fiel servicio del arzobispo Treanor al pueblo de Dios en esta iglesia local -son palabras del Pontífice-, a la sociedad irlandesa en general, a la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea y, más recientemente, a la Sede Apostólica, Su Santidad se une a vosotros para encomendar su alma a la amorosa misericordia de Cristo Buen Pastor".

Compromiso para consolidar la relación fe-cultura

Un hombre capaz de forjar fuertes lazos de amistad, de mantener el contacto con su familia con afecto y gratitud, de enseñar a las nuevas generaciones los valores fundacionales de la doctrina social católica en un mundo cambiante y necesitado de justicia, fraternidad y compromiso laico en los que él tanto creía. Este fue el corazón de la homilía pronunciada por el jesuita Alan McGuckian, que comenzó recordando un par de anécdotas de la adolescencia de Treanor, entre ellas una que recuerda el momento en que apareció en la casa el primer televisor, cuya gestión había provocado peleas entre los hermanos, lo que hizo que su padre decidiera hacerlo desaparecer para evitar inútiles y dañinas disputas por cuestiones materiales. Un ejemplo biográfico utilizado por monseñor McGuckian para subrayar el compromiso crucial y nunca abandonado del difunto nuncio por construir una relación sólida entre fe y cultura. Un aspecto tomado prestado y hecho suyo de la enseñanza de Juan Pablo II, cuya máxima citó el prelado: “La fe que no se convierte en cultura no es ni plenamente abrazada, ni plenamente pensada, ni fielmente vivida”.

Confianza en cada bautizado para la misión de la Iglesia

McGuckian, que trabajó con el arzobispo Noël en Down y Connor en el proyecto Living Church y más tarde en la Conferencia Episcopal Irlandesa, especialmente en materia de justicia y paz, destacó también el verdadero sueño de Treanor: «Que todos los bautizados, clero, laicos y religiosos trabajen juntos por la misión de la Iglesia y por el bien común. Admiraba igualmente al sacerdote que ejercía su ministerio con alegría -recordó-, al empresario que trabajaba y proporcionaba puestos de trabajo que sostenían a muchas personas, a los religiosos que estaban en primera línea contra la pobreza y la injusticia, a los profesores que se esforzaban por mejorar la sociedad a través de la educación católica y por llevar a Cristo a los jóvenes".

Pasión por el proyecto europeo

En las palabras del celebrante, el profundo compromiso con el proyecto europeo "nacido del deseo de forjar una cultura compartida y vivificante en una situación de terrible división, manifestada en su peor momento en los horribles excesos de la Segunda Guerra Mundial. Noël -subrayó el obispo- vio que los grandes líderes de las naciones recientemente enfrentadas habían intentado crear algo común que fuera auténticamente laico e inclusivo. Estaban convencidos, al igual que Noël, de que la fuente más fiable de los valores que podían impulsar un proyecto tan audaz era el Evangelio de Jesús".

La protección de la vida y la justicia, contra toda guerra

De nuevo se citó una carta pastoral del arzobispo, dirigida en 2018 a estudiantes y jóvenes adultos, inspirada en los mensajes por la paz del Papa Francisco. McGuckian compartió lo que para él era supuestamente un sentimiento de "frustración porque la gloriosa herencia de la doctrina social católica no está constantemente ante nuestros ojos y en nuestros labios". De ahí la conclusión de la homilía: "Qué importantes son estos principios medievales de 'proporcionalidad, justicia y protección de la vida' en relación con las guerras que hoy hacen estragos ante nuestros ojos, especialmente en Gaza y Ucrania".

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21 agosto 2024, 16:15