Pizzaballa: la consagración de la Iglesia del Bautismo de Jesús es un signo de unidad
Vatican News
«Es un momento muy esperado. Después de muchos años por fin podemos dedicar la Iglesia bautismal de Jordania, al-Maghtas». A los medios vaticanos, el Patriarca latino de Jerusalén, cardenal Pierbattista Pizzaballa, expresa la esperanza ligada a la consagración mañana, 10 de enero, de la nueva iglesia del Bautismo de Jesús, en presencia del cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin.
Palabras de Pizzaballa
Todo esto tiene lugar, continúa explicando el cardenal, «en un año importante, el año del jubileo de la Iglesia y el 25º año de la peregrinación a ese lugar santo», refiriéndose a la visita a al-Maghtas de San Juan Pablo II. En aquella ocasión, el Papa Woytila habló de «un lugar tan impregnado de historia», cerca de los «vestigios de la ciudad más antigua del mundo», descrita por las Sagradas Escrituras como «un lugar que lleva la huella no sólo del hombre, sino de Dios mismo». Veinticinco años después, la llamada del Papa Francisco a animar a los cristianos de Jordania a imitar cada vez más a Cristo adquiere aún más importancia debido a los continuos conflictos en Oriente Medio. El cardenal Pizzaballa señala que «la dedicación de una nueva iglesia» es, por tanto, un «signo de unidad y de deseo de continuidad de vida y de crecimiento de la Iglesia en Jordania y en todo Oriente Medio».
El papel de Jordania
La nueva iglesia latina de al-Maghtas está situada en un terreno militarizado hasta los años 90 e identificado, gracias a los esfuerzos del padre franciscano Michael Piccirillo, como el lugar de la «Betania más allá del Jordán» mencionada en el Evangelio de Juan y donde Jesús fue bautizado. Esta obra, fruto de la coordinación coral, no habría sido posible sin los esfuerzos de Jordania. Para destacar el papel del país en el nacimiento y desarrollo de la religión cristiana, se inauguró en Ammán una exposición, que llegará a Roma a finales de enero, en la que se muestran más de 80 objetos que se remontan al siglo I d.C. y abarcan los periodos bizantino, islámico y hachemí.
A la espera de la celebración
Toda la atención se centra en la celebración de mañana. El Papa Francisco ha pedido al Secretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, que lleve, en esta ocasión, su saludo no sólo a los católicos presentes, sino también a las autoridades civiles, así como a los fieles de otras religiones y a quienes promueven la misión de la Iglesia, la libertad religiosa, la paz en el mundo y el bien de la persona humana.
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