Comunicado conjunto de la CEC y de la Misión de Verificación de la ONU
Griselda Mutual - Ciudad del Vaticano
La Conferencia Episcopal de Colombia y la Misión de Verificación de la ONU emitieron, en este 8 de enero, un comunicado conjunto sobre el proceso de Verificación y Veeduría del Cese al Fuego Bilateral, Temporal y Nacional entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional, realizando un llamado a las partes a preservar los logros obtenidos en materia de reducción de violencia durante los meses de vigencia del cese al fuego.
“La Misión de Verificación de la ONU y la Conferencia Episcopal son conscientes de las dificultades del cese al fuego temporal y de la falta de consenso en relación con la implementación de determinados aspectos del Acuerdo de Quito. Comparten la necesidad de un acuerdo de cese al fuego más robusto que genere mayor confianza entre las partes y en la sociedad colombiana”, expresaron.
Al cumplimiento del plazo del Cese al Fuego temporal – llamado Acuerdo de Quito, que ha regido entre el 1º de octubre y el 9 de enero de 2018- exhortan a las partes a avanzar en el diálogo, a que se continúen reduciendo los niveles de violencia, y se consoliden y amplíen los beneficios logrados para las comunidades desde el establecimiento del cese al fuego.
Por otra parte, tres días antes, el 5 de enero, la Misión de Verificación de la ONU en Colombia publicó un comunicado de Prensa relativo al primer informe trimestral del Secretario General Antonio Guterres, en el cual realiza un balance sobre la implementación de algunos puntos del Acuerdo Final de Paz relacionados con la reincorporación de las FARC-EP, y las garantías de seguridad para las comunidades y organizaciones en los territorios.
Guterres destacó, entre otras cosas, el impacto tangible que el proceso de paz ha tenido en el país y las oportunidades que se han abierto para atender desafíos históricos. “Cambiar las armas por la política -añadió- y la oportunidad de participar en las elecciones fue un objetivo fundamental del proceso de paz. Los próximos meses serán cruciales para alcanzar ese objetivo, y será esencial contar con disposiciones de seguridad adecuadas para todos”.
En relación al impacto humanitario del cese al fuego temporal entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional, destaca el impacto positivo, a pesar de los obstáculos que se presentaron, reconociendo asimismo que “si bien existen grandes desafíos para la consolidación de la paz en Colombia, tiene confianza en que la dinámica generada en 2107 por el cese al fuego y la dejación de armas se puede mantener”.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí