Nigeria reza por el fin de los ataques a cristianos

Sofía Lobos - Ciudad del Vaticano

Los obispos nigerianos han organizado una marcha que se celebrará el 22 de mayo para protestar contra las continuas masacres a cristianos cometidas por los pastores fulani, que tendrá lugar en Makurdi, la capital del estado de Benue, la cual forma parte del llamado cinturón central, (Middle Belt), en el centro de Nigeria, que divide el Norte de mayoría musulmana, del sur en gran parte habitado por cristianos.

La Iglesia de esta nación, ha pedido la participación activa del pueblo en esta iniciativa, con el fin de denunciar de manera pacífica una realidad de violencia que se ha cobrado ya la vida de miles de cristianos.

Levantar la voz en defensa de una comunidad que sufre

Así lo ha explicado Mons. Wilfred Chikpa Anagbe, obispo de la diócesis de Makurdi, en unas declaraciones para la organización Ayuda a la Iglesia Necesitada: 

"Pido que recen por nosotros y se hagan portavoces de lo que está sufriendo nuestra comunidad. Tenemos que levantar la voz en nuestra defensa. Nigeria es parte de las Naciones Unidas y no podemos estar abandonados y aislados del mundo”, afirma el prelado, asegurando que hay un plan concreto y explícito para islamizar las áreas cristianas,  a la vez que denuncia las muertes de dos sacerdotes de su diócesis; el padre Joseph Gor y el padre Félix Tyolaha, junto con al menos 17 fieles, mientras celebraban la misa a las seis de la mañana.

"Entre las víctimas se encontraban una catequista y la presidenta del consejo parroquial, ambas madres de familia, así como también el director de la única escuela secundaria en la aldea", añade Monseñor Anagbe indicando que el número de víctimas total de esta violencia contra los cristianos "todavía no es definitivo", ya que lamentablemente algunas de las familias de los fieles están también desaparecidas.

Inactividad por parte del Gobierno ante los ataques

Los ataques fueron perpetrados por pastores de ganado musulmanes de tendencias islamistas que pertenecen a la etnia de los fulani.

“Esta vez no hablamos de Boko Haram, aunque algunos de los pastores en el pasado hayan tenido relaciones con el grupo terrorista y ambos grupos comparten la misma intención de islamizar toda la región", continúa diciendo el obispo, destacando que uno de los aspectos que más le preocupa de esta oleada de violencia, es la inactividad total por parte del Gobierno, especialmente el federal. 

"Cuando los ataques son perpetrados nunca hay agentes policiales o militares. Sin mencionar que los fulani tradicionalmente viven principalmente en los bosques y no pueden permitirse el lujo de  tener armas tan sofisticadas". 

La ayuda de la Iglesia

Esta violencia ha ocasionado un gran número de desplazados internos, más de 100 mil repartidos en cuatro campamentos en la diócesis de Makurdi.

“La Iglesia está socorriendo a la población, prestando ayuda y asistencia a los más desprotegidos, aunque la situación es desbordante ya que el Gobierno tampoco en este caso nos ayuda”, añade Monseñor Anagbe reiterando su petición de que la comunidad internacial no permanezca indiferente ante estos crueles hechos, e invitando a todos a unirse el 22 de mayo, también espiritualmente a través de la oración, a la marcha protesta contra esta masacre a la comunidad cristiana.