Caravana migrantes. Unicef: los niños llegan con mucho estrés y angustia
Unicef está acompañando la caravana desde que entró al territorio mexicano en Tapachula, Chiapas, y está trabajando en coordinación con las autoridades de otras organizaciones de la sociedad civil y agencias de Naciones Unidas. En un comunicado emitido este 8 de noviembre, informó que muchos de los niños, niñas y adolescentes que viajan en la caravana muestran signos de angustia y malestar psico-social.
Lo principal es la asistencia humanitaria básica
El trabajo de recepción y acogida que se está llevando a cabo en Ciudad de México, donde aún siguen llegando los migrantes, se concentra en el estadio Jesús Martínez “Palillo” de la Ciudad de México, en donde se han montado carpas con espacios específicos para bebés, niños, niñas y adolescentes. Entrevistada por Sor Bernadette Reis para Vatican News, Rocío Núñez, Coordinadora de Medios de Unicef México, explicó que el trabajo se desarrolla identificando las necesidades específicas de niños, niñas y adolescentes, y posteriormente brindando y apoyando con los servicios necesarios.
“Lo principal – aclaró - ha sido brindar asistencia humanitaria básica como agua potable, kits de higiene, de saneamiento, lavado de manos, incluso ropa y espacios dignos para dormir”.
En relación a los espacios, la trabajadora de Unicef explicó que también hay un lugar específico donde se canalizan los casos de niños, niñas y adolescentes con necesidades especiales, que requieren una protección especial: “Los casos de riesgo de violencia se llevan a esa carpa donde está la procuraduría de protección- refiere- . Es muy importante recordar que Unicef trabaja con las autoridades y trabaja en colaboración con organizaciones de la sociedad civil y otras agencias de Naciones Unidas”.
Los niños tienen derechos cualesquiera el lugar de proveniencia y adonde sea que vayan
Rocío Núñez hizo hincapié en el trayecto que deben realizar los niños, que no está exento de peligros:
“Ellos vienen de un trayecto complejo: muchas de las familias salen de sus países de origen por situaciones de violencia, muchos salen huyendo de las pandillas y vienen de un contexto de violencia y pasan por un trayecto que es muy estresante, y tienen muchos riesgos en el camino. Cuando hay rutas irregulares en la inmigración, es importante recordar que corren riesgo de ser extorsionados, abusados, entre otros”, dijo.
Niños llegan con estrés y mucha angustia
Debido a todo esto los niños “llegan con mucho estrés y mucha angustia”, explica. “Hemos visto que hay algunos niños que tienen ansiedad al separarse de sus padres y es muy importante trabajar en el aspecto psico-emocional”. En ese sentido, Unicef está brindando apoyo especial psico-emocional a los niños, niñas y adolescentes y a las madres en el caso que lo requieran:
“Los espacios son lugares adaptados específicamente para que puedan sacar ese estrés, que es una respuesta normal a un proceso complejo como el que han vivido en la caravana, pero se debe trabajar para que eso no escale y no se convierta en un trauma tóxico que es en lo que puede convertirse todo esto. Es importante trabajar en todo eso e identificar necesidades especiales en los niños”, concluyó.
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