La Semana Santa en Guatemala y sus procesiones

Patricia Ynestroza-Ciudad del Vaticano

El martes pasado, la Embajada de Guatemala ante la Santa Sede presentó la conferencia: “Semana Santa en Guatemala: Historia y tradiciones”. Intervinieron los señores Dorys Barahona López y Rodolfo Luján Lunsford.

Rodolfo Luján Lunsford es un restaurador de obras de arte y consultor de la Unesco, quien le ha encargado la restauración de monumentos en varios países entre ellos, Etiopía, Grecia, India y Corea. Y en Italia entre otros, ha restaurado la Pinacoteca Vaticana, la Iglesia de los Santísimos Apóstoles en Roma y la Basílica de San Francisco en Asís.

Y Dorys Barahona López es fundadora y presidente de la Asociación Guatemala-Colorado, que apoya a la comunidad de migrantes latinoamericanos en los EEUU, y co-fundadora de la Praxis Global Solutions, entidad que apoya a los gobiernos locales, regionales y nacionales en el refuerzo de las capacidades institucionales para el mejoramiento de la innovación social y la promoción del intercambio de nuevas tecnologías. Y ha trabajado como consejera especial en Comisión de los refugiados y desplazados de Guatemala, CEAR.

La importancia de las procesiones en Guatemala

Los desfiles procesionales de la Semana Santa, transforman la ciudad durante ese periodo y son el resultado de la evolución durante siglos de las formas, modos y maneras de las hermandades, las cuales cuentan entre sus miembros a personas de todas las clases sociales. En la evolución de estas corporaciones han influido múltiples factores, tanto religiosos como artísticos, sociales e históricos.

Además, las procesiones en Guatemala son caracterizadas por las alfombras que adornan las calles en donde son llevadas en hombros por períodos de hasta dieciocho horas de duración, las imágenes que representan la Pasión de Jesús. Las alfombras son elaboradas representando figuras folclóricas y religiosas. Estas artesanías son realizadas con aserrín de colores, flor de corozo, rosas, hojas de palma y otros materiales orgánicos.

Los desfiles van acompañados durante todo el recorrido por orquestas musicales que interpretan marchas fúnebres o festivas compuestas por artistas nacionales en su mayoría.

Las alfombras son de colectivas, es decir se hacen por cuadras y por familias completas, ellos son los que trabajan en la confección de los moldes, el teñido del serrín y la elaboración la alfombra. Sobre la alfombra pasará el anda de la imagen del Nazareno, del Sepultado y otras en las grandes procesiones de Cuaresma y Semana Santa. La alfombra se destruye cada vez que una procesión pasa. En algunos lugares, se deben hacer varias alfombras, una tras de otra, ya que son varias las procesiones que pasaran por allí. Algunas personas recogen los materiales dispersos, creyendo que tienen poderes sanadores.

Doris Barahona, habló sobre el factor social y antropológico de la realización de la Semana Mayor en el país.

Rodolfo Luján habla sobre el arte que caracteriza las procesiones.  Las imágenes que representan la religiosidad, han tenido un aspecto fundamental en la historia del país.