Haití: una voz de aliento para Italia

Emanuela Campanile – Ciudad del Vaticano

"Hola, me alegra que hayan recibido nuestro video. El objetivo era estar lo más cerca posible de todos ustedes. Nosotros, desde aquí, pensamos en ustedes. Cuando tenemos necesidades, ustedes nos ayudan y apoyan. En este momento queríamos ser nosotros los que los apoyamos y ayudamos. A nuestra manera". Es la nota vocal de Maddalena Boschetti, misionera en Haití, quien con la Asociación Aksyon Gasmy se ocupa de los niños y niñas con discapacidades. Básicamente, de los últimos de entre los últimos. Ella también estaba allí hace diez años, en el momento del terremoto que causó más de trecientos mil muertos.

De WhatsApp me llegaron tres, uno detrás del otro: "En estos días, aquí, en la casa donde se concentran las actividades para los niños discapacitados, y para los niños de una clase especial, están las mamás y los responsables de las diversas actividades. Son fenomenales. Todos están entusiasmados  –  continúa Maddalena – con su acento genovés –  y con todo el corazón han leído el mensaje en italiano. Saben lo que está pasando en Italia. Son conscientes de ello y a su manera los niños lo han entendido. Preparamos la idea en menos de veinticuatro horas. Estoy feliz sabiendo que les ha gustado, era importante para mí que les llegara un gesto de amor de nuestra parte”.

Las tres notas vocales me las envió una colega que en estos días trabaja en casa. Nos hemos organizado así aquí en la redacción, por turnos. Son los días del COVID-19, de la gran pandemia.