Día Mundial de los Océanos: nuestro futuro en el mar
Roberta Gisotti - Ciudad del Vaticano
Los océanos son nuestro futuro. Nos lo recuerda una vez más la ONU, que en 2008 estableció el Día Mundial de los Océanos para protegerlos y utilizar los recursos marinos de manera sostenible para la vida de todo el planeta. Una cuestión que ya se planteó durante la primera Conferencia sobre el Medio Ambiente convocada por las Naciones Unidas en Río de Janeiro (Brasil) en 1992, cuando se organizó el evento "Día de los Océanos - El planeta azul" - promovido por el Instituto de los Océanos del Canadá - en paralelo con la labor oficial, para dar a las organizaciones no gubernamentales y a la sociedad civil la oportunidad de expresar sus opiniones sobre cuestiones ambientales.
En ese momento nació la idea de establecer un día dedicado a la protección del planeta azul, hasta la celebración en junio de 2017, en Nueva York, de una Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos.
Usar los recursos marinos de manera sostenible
"Innovación para un océano sostenible" es el tema elegido en este año 2020 para reavivar el interés de la comunidad internacional. Debemos aumentar -pide Naciones Unidas- "la conciencia mundial de los beneficios que la humanidad obtiene del océano y nuestro deber individual y colectivo de utilizar sus recursos de manera sostenible".
De ahí la invitación a los gobiernos y comunidades de todo el mundo, a los centros científicos e institutos de investigación, a los organismos públicos y privados, a los expertos y a los entusiastas del mar a movilizarse para proteger los océanos y comprender que "¡las generaciones futuras también dependerán del océano para su sustento!".
Informe de la FAO sobre la pesca y la acuicultura
Las buenas noticias sobre la explotación de los recursos pesqueros provienen de la FAO, que presentó hoy el Informe Mundial sobre el Estado de la Pesca y la Acuicultura. Casi el 80% de todo el pescado desembarcado proviene de poblaciones biológicamente sostenibles. Un sector estratégico, el de la pesca, con una facturación anual global de medio billón de dólares y un crecimiento récord de la producción de 20,5 kilos per cápita al año, que pone de relieve -según el Informe- el papel fundamental del pescado para la seguridad alimentaria y nutricional mundial.
"El pescado y los productos del pescado", dice el Director General de la FAO, QU Dongyu, "se consideran no sólo los alimentos más sanos del planeta, sino también entre los que tienen menos impacto en el medio ambiente natural".
El daño de la pandemia y los riesgos del sector
Sin embargo, las políticas de sostenibilidad siguen siendo fundamentales en las regiones y países afectados por el hambre, la pobreza y los conflictos, para cuyas poblaciones "no hay alternativa a las soluciones sostenibles de las plantas" de la pesca y la acuicultura. También hay alarma por las consecuencias de la pandemia, que podría reducir la producción pesquera en más del 6% debido a las prohibiciones, la escasez de mano de obra a causa de la emergencia sanitaria, la interrupción del transporte internacional y la fuerte reducción de la oferta y la demanda turística.
La gestión de los recursos pesqueros está funcionando
Pero hay un gran optimismo sobre el potencial del sector y la mayor sensibilidad de los gobiernos, las empresas del sector y la opinión pública sobre la necesidad de gestionar los recursos marinos de forma virtuosa, aprovechando también la innovación y las tecnologías, disponibles en la actualidad, subraya Audun Lem, vicedirector del Departamento de Pesca y Acuicultura de la FAO.
"Este es el mensaje positivo de nuestro Informe 2020: la gestión de los recursos pesqueros está funcionando y ha llegado el momento de aplicarla más ampliamente".
Siga nuestras historias de Fe y Acción: nuestras vidas en tiempos del coronavirus
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí