El Salvador. El trabajo diario de las mujeres por una sociedad más inclusiva
Manuel Cubías - Ciudad del Vaticano
Cercanía, sensibilización y capacitación
Ana Ruth Orellana relata a Vatican News los detalles de su trabajo: “me toca coordinar y visitar comunidades alejadas de la capital, a las que muchas veces solo se llega caminando por pequeñas veredas, para facilitar capacitaciones que permitan dotar a las mujeres de todos aquellos conocimientos y herramientas para poder defenderse y evitar que sus derechos sean vulnerados (…) también desarrollo procesos de sensibilización en temas referentes a los derechos humanos, particularmente en lo que concierne a las mujeres (…) Considero que las mujeres deben estar organizadas para defender sus derechos sociales, económicos, culturales y ambientales”.
Ana Ruth trabaja en 17 municipios del país, distribuidos en cinco departamentos. Ella afirma que el Movimiento Salvadoreño de Mujeres reúne a unas cincuenta mil participantes. Se trata de una organización con 33 años de trabajo, el cual realizan a nivel nacional, municipal y comunitario. También poseen redes vinculadas a la Iglesia Católica y a las iglesias evangélicas, donde se hace posible tratar las problemáticas e idear soluciones que “vamos abordando poco a poco”. Para ellas, indica Orellana, es importante el trabajo con los varones: “que los hombres entiendan la importancia de defender los derechos de las mujeres y de prevenir la violencia”.
Tomar decisiones
Ana Ruth declara que otra área en la que trabaja el Movimiento es el de fortalecer los liderazgos locales y municipales que impliquen toma de decisiones. De esta manera se logra incidir tanto a nivel local como nacional.
A nivel municipal se realiza la iniciativa La Ventana Ciudadana, afirma Orellana, “que permite la formación de cuadros para que pueda ejercer la contraloría social sobre la situación de la violencia hacia la mujer en los municipios y a nivel nacional, y verificar que las instituciones responsables de la justicia funcionen eficazmente”.
Una mirada femenina sobre la ecología
Otra área de preocupación es el del ambiente y el hecho de tener una visión ecológica integral, que una a las personas y el territorio donde viven, con todos los seres vivos. Cada comunidad cuenta con una serie de recursos naturales, subraya Ana Ruth, y añade que nos enfrentamos con que en “las comunidades se está dando cada vez más la privatización de esos recursos”, como el agua. “Al trabajar con ellas buscamos incidir en la aprobación de leyes que favorezcan a la población salvadoreña (…) Ya llevamos varios años luchando junto con otras organizaciones para que la Asamblea Legislativa apruebe una Ley General de Aguas”.
Deterioro de las condiciones de vida
Ana Ruth puntualizó que todas las iniciativas y proyectos que lidera el Movimiento Salvadoreño de Mujeres responden a varios problemas clave que vive la población en general y las mujeres en particular: “vemos el aumento del deterioro de las condiciones de vida, el aumento de la desigualdad existente entre hombres y mujeres, especialmente en el terreno del desempleo, la violencia de género, desigualdad en las relaciones de poder en las familias, en las comunidades. Otra realidad en la que estamos trabajando es en el alto nivel de embarazos en adolescentes”.
Datos que golpean
Según datos del Ministerio de Salud salvadoreño, en el año 2017 se registraron 19,190 niñas y adolescentes embarazadas entre los 10 y los 19 años de edad, lo que representa el 28 por ciento del total de embarazos. Otro dato que ilustra la gravedad de la situación de violencia contra la mujer es que El Salvador registró en 2016 y 2017 tasas de feminicidios de 16 y 12 por cada 100,000 habitantes, respectivamente, por encima de lo considerado a nivel internacional como una epidemia. Otro dato que revela este informe es que “se observa que, de las 19,190 niñas y adolescentes registradas en las inscripciones prenatales en 2017, sólo 1,050 fueron registradas en los centros escolares”. Orellana insiste en que las realidades a las que ha hecho referencia deben de enfrentarse de manera integral y como una sola realidad.
No perder la democracia
Ana Ruth Orellana se refiere a las elecciones de alcaldes y diputados que se realizaron el pasado 28 de febrero: “no podemos perder la democracia que hemos ganado a través de los 12 años de guerra que tuvo el país”.
¿Por qué celebrar el día de la mujer?
“Las mujeres para poder gozar de derechos políticos, sociales y económicos, a nivel nacional y mundial, debemos recordar las luchas que protagonizaron tantas mujeres. Conmemoramos a todas las que nos abrieron el camino para que nosotros gocemos ahora de nuestros derechos. Recordamos a todas las que lucharon, recuerdo a Prudencia Ayala, la primera mujer salvadoreña que se proclamó candidata a la presidencia de la república. Nuestro deber es continuar fortaleciendo el proceso democrático”.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí