Unos hombres esperan mientras las mujeres (no en la foto) y sus hijos aguardan que los miembros del personal de Médicos Sin Fronteras comprueben si hay signos de desnutrición, en un campo de desplazados internos en las afueras de Herat.

MUNDO

CAFOD: "Regala" a los afganos hambrientos esta Navidad

La agencia oficial de ayuda de la Iglesia Católica en Inglaterra y Gales ha unido sus fuerzas a las del Comité de Emergencia de Desastres para enviar ayuda a Afganistán, donde más de 8 millones de personas están al borde de la hambruna, y donde en los próximos tres meses más de un millón de niños menores de cinco años corren el riesgo de morir.

Por Linda Bordoni y Francesca Merlo

En Afganistán, más de 8 millones de personas están al borde de la hambruna. En los próximos tres meses, más de un millón de niños afganos menores de cinco años corren el riesgo de morir por desnutrición o enfermedad, ya que sus familias no pueden comprarles alimentos en medio del colapso económico de la nación y de un sistema de salud en crisis.

Pero, señalan las organizaciones humanitarias al lanzar un llamamiento sin precedentes para la nación: "sólo se necesitan 10 libras esterlinas para proporcionar tratamiento a un niño desnutrido durante tres semanas y sólo se necesitarían 20 libras esterlinas para alimentar a una familia entera durante toda una semana".

Como cristianos y como hombres y mujeres de buena voluntad que se preparan para celebrar el Adviento y el nacimiento del Señor, estamos llamados a pensar en nuestros hermanos y hermanas necesitados y a actuar".

Llamamiento de ayuda

Entre las agencias de ayuda que se han unido a un llamamiento lanzado por el Comité de Emergencia de Desastres está CAFOD, la Agencia Católica para el Desarrollo en el Extranjero. Janet Symes es la responsable de la región de Asia y Oriente Medio de CAFOD y explica a Linda Bordoni, de Vatican News, que este llamamiento debe hacerse ahora porque "se trata de un país que lleva décadas sufriendo los efectos de los conflictos". Añade que "están atravesando la peor sequía que han tenido en 27 años y la situación económica se ha deteriorado tan drásticamente que más de 8 millones de personas, entre ellas más de un millón de niños, corren el riesgo de morir, y la mitad de la población del país se enfrenta a un hambre aguda". Es decir, 22,8 millones de personas.

El invierno se acerca

El invierno, señala, está llegando a Afganistán, donde las temperaturas pueden descender hasta -12 grados centígrados. Es esencial actuar con rapidez antes de que llegue el frío.

Hombres afganos preparan calentadores tradicionales para prepararse para el frío invierno que se avecina

Sin embargo, la gente tiene dificultades para poder comprar alimentos, por no hablar del combustible para mantenerse caliente, dice Symes. Afganistán depende históricamente de la ayuda, y el empeoramiento de la situación política del país ha hecho que muchos de sus donantes internacionales se retiren. Por desgracia, como suele ocurrir, "las personas que más sufren son las más pobres, las más vulnerables, las mujeres mayores, las personas con discapacidad y los niños". "Todos ellos necesitan desesperadamente nuestra ayuda", añade.

Symes explica que lo más necesario en estos momentos es el dinero en efectivo: "La gente necesita dinero, (...) En realidad hay suficientes alimentos en el país, pero la gente no puede permitírselos".

La gente compra fruta en un puesto de carretera en un mercado de Jalalabad

También hay suficiente combustible. "Así que estamos tratando de proporcionar ayuda en efectivo para que puedan comprar alimentos y combustible", los dos elementos esenciales para la supervivencia cuando se acerca el invierno. En algunos casos, continúa Symes, estamos proporcionando ayuda alimentaria. "Esto es para las personas que tienen dificultades para acceder a los mercados" o a los alimentos, por la razón que sea.

¿Qué necesitamos?

Para aclararlo, Symes especifica: "pedimos donaciones para poder hacer frente a esta aguda crisis de hambre en el país. Buscamos alimentos para que la gente pueda sobrevivir al invierno. Buscamos combustible, comida, mantas... este es el tipo de cosas que se pide a la gente".

Tiempo de donar

Symes continúa señalando que "especialmente durante esta temporada: Adviento, y luego Navidad, es un momento para pensar en la gente del mundo que no está en tan buena situación como nosotros".

Explica que, como organización católica, "es absolutamente fundamental, dentro de nuestra fe, ayudar a las personas de todo el mundo, sea cual sea su fe".

Un trabajador afgano hace madejas de lana, Herat

"Se trata de personas que tienen una necesidad desesperada. Creo que encaja totalmente con nuestra fe". Señala que CAFOD es capaz de trabajar con organizaciones afganas, que entienden realmente de dónde viene su apoyo, "que viene de gente que realmente quiere poder ayudarles en su momento de necesidad".

Symes también recuerda que "el Papa Francisco dice que hay una preocupación unánime por la situación en Afganistán y ha indicado claramente lo importante que es que seamos capaces de apoyar a su gente en estos momentos".

Donativos

Es muy fácil donar a la causa, dice Symes. Siguiendo los enlaces de la página web de CAFOD, te darás cuenta de que se necesita muy poco para ayudar a muchas personas en Afganistán.

"Así que cuando piense en todo el dinero que estamos gastando en este momento para nuestras propias celebraciones", considere, concluye, que "una cantidad muy pequeña servirá de mucho para ayudar a la gente de Afganistán".