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Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum aspiran a la presidencia de México. Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum aspiran a la presidencia de México.

México: Elecciones presidenciales sin precedentes en más de un sentido

Por primera vez en la historia política de México, una mujer será Presidenta en 2024. Los principales partidos, divididos en dos bloques, han designado a sus candidatos, y ambos son mujeres. Claudia Sheinbaum, del partido Morena del presidente saliente López Obrador, y Xóchitl Gálvez, cabeza del Frente Amplio por México, que aglutina a todas las fuerzas de la oposición. Echamos un vistazo a estas novedades en la política mexicana.

Xavier Sartre - Ciudad del Vaticano

En México, las elecciones presidenciales de 2024 encierran ya muchos elementos novedosos. En primer lugar, y de forma más destacada en los medios de comunicación, dos mujeres compiten por convertirse en la próxima presidenta del país, sucediendo a Andrés Manuel López Obrador, que no puede optar a un segundo mandato. A la izquierda, Claudia Sheinbaum, exalcaldesa de Ciudad de México y cofundadora de Morena, el partido presidencial. A la derecha, Xóchitl Gálvez, empresaria autodidacta. Es la primera vez desde la independencia que los mexicanos están casi seguros de estar representados por una mujer.

No es de extrañar, según Hélène Combes, directora de investigación del Centro Nacional de la Investigación Científica de Francia (CNRS) en comisión de servicio en el CERI Sciences Po. Desde los años 90 se ha producido una feminización muy fuerte de la vida política", explica. Desde 1996, México tiene cuotas de un máximo del 70% de candidatos legislativos del mismo sexo", y este umbral se redujo al 50% en 2014. "Hoy, México es uno de los pocos países del mundo que cuenta con una legislatura completamente paritaria desde 2018, primera fecha de aplicación efectiva de la nueva ley", añade.

La presencia de dos mujeres en la elección presidencial también es resultado de los cambios que ha experimentado la sociedad mexicana en los últimos veinte años. "Ha habido un auge del movimiento feminista en torno a cuestiones sociales, la violencia y las desapariciones", prosigue Hélène Combes. Prueba de ello es que en México se acuñó el término "feminicidio", utilizado actualmente en muchos ordenamientos jurídicos.

Pero el género de los candidatos no es la única novedad de estas elecciones presidenciales. Xóchitl Gálvez es la candidata de una coalición de partidos hasta ahora enfrentados. En 2024 representará al PAN, el derechista Partido Acción Nacional, en el poder entre 2000 y 2012; al PRI, el Partido de la Revolución Institucional, el antiguo partido hegemónico que gobernó México desde el final de la Revolución hasta el año 2000; y, por último, al PRD, el Partido de la Revolución Democrática. Este último fue creado por el actual presidente López Obrador antes de separarse y fundar Morena. Unidas en su deseo de derrotar al izquierdista Morena, estas tres formaciones, que van de la derecha al centro-izquierda, aceptaron muchos compromisos para presentar un frente unido y proponer a Xóchitl Gálvez.

Gálvez, que procede de las filas del PAN, tiene además una característica única en la política mexicana. "Procede de una minoría indígena y en las filas del PAN había esencialmente clases medias del norte del país que a menudo tenían la piel blanca, y Xóchitl Gálvez es claramente de origen indígena. De hecho, juega con esto mucho más que con la cuestión de género", señala Hélène Combes.

Para esta especialista en política mexicana, éste es sin duda el elemento más interesante "en un México que sigue estando muy marcado por el color de la piel y la pertenencia social, y donde ambos se superponen muy a menudo", siendo los más ricos blancos, salvo raras excepciones, y los más pobres indígenas o mestizos.

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14 septiembre 2023, 10:41